El 64% de los hinchas no creen en Bauza y señalan a Agüero e Higuaín para un recambio de jugadores

Una encuesta de D’Alessio IROL para La Nación revela que se ve como un error la contratación del entrenador rosarino; la paciencia se agota con históricos delanteros y Dybala encabeza la renovación.

004_[Suplemento-Deportiva]2 005_[Suplemento-Deportiva]1

Edgardo Bauza ni soñaba con dirigir a la Argentina. Nadie lo pedía, no encabezaba los sondeos populares ni atrapaba adhesiones dirigenciales. Fue el emergente entre las desconcertantes explosiones de la AFA. Fue la solución local, el parche exprés, para el vacío que había dejado la renuncia de Martino. Si la elección del Patón no conquistó respaldo mediático antes de que la selección comenzara a jugar, ahora que sólo ha cosechado cinco de los 12 puntos del breve ciclo y se encuentra en la 6ta posición de las eliminatorias rumbo a Rusia 2018, incluso al margen del repechaje, el veredicto de los hinchas es contundente: dos de cada tres hinchas no confían en él, no lo querían al frente del seleccionado.

En una encuesta para La Nación de D’Alessio IROL, sobre 800 casos mayores de 18 años, realizada entre el 20 y el 25 de octubre pasados, la primera pregunta arrojó el resultado más contundente, ninguna otra respuesta reunió tanta contundencia: ¿Fue un acierto designar a Bauza como entrenador de la selección? El No trepó hasta el 64%, mientras que el Sí llegó al 30% y el 6% restante respondió “no lo sé”. El estudio también arroja, entre otros puntos, que los simpatizantes hubiesen preferido a Diego Simeone como entrenador, señalan a la AFA como la principal responsable del derrumbe de la selección y saludarían el recambio de algunos futbolistas, con la salida de Agüero y el ingreso de Dybala como síntesis de la metamorfosis.

Bauza jamás se imaginó este presente. Así como nunca creyó que iba a dirigir a la Argentina, tampoco pensó que en apenas tres meses de gestión se encontraría acorralado por la próxima serie con Brasil y Colombia. Bauza había desactivado la posibilidad de dirigir a la selección después que una tenue esperanza rodara por el barranco de la desilusión: desde la AFA lo sondearon cuando buscaban el reemplazante de Sabella, pero le duró un parpadeo la aspiración. Y les confesó a sus íntimos que, si alguna vez dirigía una selección, sería la de Ecuador.

Pero después de ser el primer DT que se entrevistó con Pérez, y a medida que se iban automarginando los preferidos, apellidos más calificados como Simeone, Sampaoli, Bielsa, Pochettino, Berizzo? volvió a soñar. Pese a que el Patón tenía trabajo en San Pablo. Entre Ramón Díaz, Russo y Caruso Lombardi? resultó elegido. En medio de una comedia de enredos, Pérez dijo que era el hombre para desembarcar en? Francia. Sí, confundió Rusia con Francia. Para rubricar un camino que desatendió lógicas y prioridades. Aun así, Bauza jamás se engañó: siempre supo que nunca fue la prioridad. “Me reuní con Russo y el otro no me acuerdo cómo se llama… No tomé la pastilla, discúlpenme”, resbaló Pérez días antes de la designación. Bauza asumió en una posición de fragilidad. ¿Y los hinchas a quién hubiesen nombrado? Ellos optaron por Simeone (42%), Bielsa (21%) y Gallardo (10%).

¿Tuvieron alguna participación los futbolistas en la elección de Bauza? No, ni les interesó. Prefirieron mantenerse bien lejos del casting. Los jugadores rápidamente advirtieron la endeblez con la que el entrenador aterrizó. Y han marcado territorio. El llamado para Ezequiel Lavezzi -inactivo desde el 21 de junio- para la serie Brasil/Colombia, avivó un viejo debate sobre la influencia de la mesa chica del plantel. Bauza lo explicó: “Lavezzi es un jugador muy importante en el grupo por todo lo que aporta. Es uno de los líderes del grupo y nos va a ayudar en la convivencia?” ¿Cómo sabe del ascendente del Pocho si no integró su ciclo más allá de algunas prácticas recreativas durante su rehabilitación por la fractura del codo izquierdo? Cuando D’Alessio IROL preguntó si Bauza tiene autoridad sobre los jugadores, nuevamente el dictamen fue concluyente: NO para el 61% de los consultados y SI para el 32%.

La selección no se metió sola en problemas. Primero fue el vacío de gobernabilidad de un comité ejecutivo despedazado. Luego, un Comité de Regularización con signos personalistas. Ahora, un permanente fuego cruzado entre un ciego espíritu de supervivencia y un afán desestabilizador. Por negligencia o desapego, la selección también cayó en la telaraña de una AFA asolada. El público lo percibe y condena: ¿quién cree que es el máximo responsable del mal momento de la selección? El 53% apuntó a la AFA.

Pero los futbolistas no pueden hacerse los distraídos. Cuando D’Alessio IROL le propuso a la gente que mencionara a dos jugadores cuyo ciclo ya estaría concluido? Agüero concentró las principales recriminaciones: el 33% señaló que su tiempo se agotó. El podio menos deseado lo completaron Higuaín (20%) y Di María (17%). Hasta Messi figuró en este rubro: el 5% enfatizó que ya no debe estar en la selección. Pero ante el sondeo contrario, es decir qué dos jugadores deberían tomar mayor protagonismo, Messi tomó un lugar protagónico: segundo, con el 17%. Quienes lo mencionaron apuestan por un mayor desequilibrio del crack de Barcelona. En realidad, la búsqueda apuntaba a conocer qué futbolistas merecen una progresiva inserción en el equipo, y bajo ese concepto el preferido fue Dybala, con un 24%. Detrás de Messi, Icardi completó este podio con el 9%. El resto de los mencionados al menos alguna vez ya estuvo en la selección. Salvo uno: “Wanchope” Ábila. Queda claro que no hay salvadores. Pero los hinchas seguirán exigiendo soluciones, sin desviar su mirada desconfiada.