La inflación endeuda cada vez más a millones de argentinos

Las dificultades económicas que atraviesan los argentinos, dado que la inflación de casi 50% en 2018 y de 19% en lo que va del año no se trasladó a los salarios, se traduce en un mayor nivel de endeudamiento.

Así lo revela un informe de la consultora D’Alessio Irol, donde informa que, por la crisis, casi 8 de cada 10 argentinos paga cuotas.

Ante esta situación, los endeudados recurrieron al pago en plazos, ya sea de tarjeta o de préstamos, por necesidad.

Mientras que en 2018 el 68% estaba pagando alguna cuota de tarjeta de crédito o préstamo, este año ese porcentaje llega al 77%. Además hoy las cuotas reducen en un tercio los ingresos familiares.

También desde la consultora citaron que “las cuotas de la tarjeta de crédito son el principal rubro de las deudas” de los argentinos y resaltaron que la mitad de los encuestados espera terminar de pagar los compromisos este año.

“La luna de miel con la tarjeta de crédito terminó, pero la necesitan y su uso resiste”, sentenció Nora D’Alessio, vicepresidente de D’Alessio Irol.

La especialista hizo referencia a las respuestas sobre la conformidad de los usuarios: en 2018 la mitad de los entrevistados le daba una calificación baja (entre 1 y 5), mientras que la otra mitad se dividía en un 26% que indicaba una nota media (entre 6 y 7) y el 24% restante le otorgaba una alta (entre 8 y 10), sin embargo este año, el 58% le adjudica una calificación baja, un 18% una media y el 24% una alta.

El informe señala además que la mitad de los encuestados desearía destinarle menos del 20% de sus ingresos al pago de deuda, pero que solo 4 de cada 10 pueden lograr pagar menos del 20 por ciento.

En cuanto al pago mínimo de las tarjetas y lo que eso significa en términos de bienestar, si bien el 63% aseguró que paga el importe total y que por eso “se siente tranquilo”, un 37% está pagando el mínimo. De ese segmento, un 17% paga el mínimo “y se siente mal”, otro 13% lo hace, pero siente que “no puede hacer otra cosa”, un 7% informó “no saber cómo se siente”.

 

Publicado por El Liberal el 17/06/19.