Nota: Likes o logros: la batalla por la autenticidad.

Volver a lo genuino: el desafío de los deportistas en la era de los influencers.

Durante años, los deportistas fueron el símbolo del esfuerzo sin filtros y la victoria como fruto del trabajo.
Pero hoy, los influencers ocupan gran parte del espacio que antes tenían los ídolos deportivos.
Según nuestro estudio:
Solo 4% de los jóvenes sigue viendo a los deportistas como ejemplo, 36% dice que los influencers tomaron ese rol y 60% admira a ambos por igual.
El esfuerzo no pasa de moda. Solo necesita un nuevo idioma para contar.
La admiración cambió: ya no se trata solo de talento o disciplina, sino de cercanía, transparencia y conexión inmediata.
El influencer no necesita ganar un torneo para inspirar; basta con mostrarse humano y real.
¿Cómo pueden los deportistas recuperar lo auténtico?
Mostrar el proceso, no solo el podio.
Escuchar y dialogar, no solo hablar.
Reivindicar los valores que no se viralizan, pero perduran.
Ser narradores de su propia historia.
Creo que la autenticidad no se mide en likes. Se demuestra en coherencia.
La coherencia es el nuevo lujo.
Quizás no se trate de competir entre deportistas e influencers,
sino de reconciliar el mérito con la cercanía.
¿Podemos recuperar para los más jóvenes la inspiración que daban los deportistas sin perder la conexión que generan los influencers?