Empresas siguen más pendientes de caída de rentabilidad que de elecciones

Advirtieron por el aumento de los costos en dólares. Las elecciones legislativas no generan preocupación. Confían en un buen cierre del año

Por Ariel Maciel, desde Mar del Plata Enviado Especial

Empresarios argentinos volvieron a mostrar su preocupación por el aumento de los costos de las materias primas, que le generan la pérdida de rentabilidad en sus sectores, aunque se mostraron expectantes con la actividad económica, un incremento en las exportaciones, en las inversiones y en las ventas. Además, los ejecutivos que participan del Coloquio de IDEA se desmarcaron del clima electoral y descreyeron que las legislativas que se realizarán en menos de diez días influyan en el clima económico.

El análisis lo realizaron los principales CEO de las firmas nacionales que integran el cónclave empresario y los participantes en general a través de la tradicional encuesta que se presenta en el evento. El aumento de las materias primas y la obligación de evitar su traslado hacia los precios finales le quitó rentabilidad a los empresarios y temen por la pérdida de volumen de ventas, que compensaban la caída de pérdida de competitividad en los precios unitarios.

Tres ejes cruzaron la segunda jornada en Mar del Plata: los factores macroeconómicos, los institucionales y los de infraestructura. Así, los ejecutivos pusieron el ojo en el tipo cambiario, en la inflación y en los salarios y su negociación a través de las paritarias como factores que afectaron la competitividad en sus empresas.

Luego, la calidad institucional fue otra preocupación de parte de los empresarios. El pedido del fortalecimiento de las representaciones se convirtió en una necesidad para afrontar los reclamos del sector. Mientras que la situación del Estado en sus representaciones –Ejecutivo, Judicial y Legislativo– se conforma como un hecho externo, la solidez de las cámaras empresarias fue un reclamo que sobrevoló el encuentro.

También se señalaron las “importantes restricciones crediticias” como hechos que limitan la competitividad. Mientras que la calificación de la mano de obra, la tecnología, la energía y la logística es lo que menos le preocupa a los empresarios, según señaló la encuesta de D’Alessio Irol.

La capacidad instalada del 80% de las empresas consultadas –en total participaron 206– se encuentra al límite, aunque se destacó que, producto de las restricciones cambiarias, varias firmas reinvirtieron sus utilidades que no pudieron remitir a sus casas centrales en desarrollos productivos.

El titular de Adefa y presidente de Fiat Argentina, Cristiano Rattazzi, desestimó que existan preocupaciones industriales por la situación de Brasil y se mostró exultante por la venta de automóviles. Además abogó por un entendimiento entre el Mercosur y la Unión Europea “para poder abrir más el mercado”. En ese sentido, insistió en la necesidad de “controlar la inflación” y festejó que el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, haya “sincerado” la problemática, le dijo a BAE Negocios.

Sin debate de candidatos

Se espera que hoy se presenten los candidatos legislativos bonaerenses, aunque está descartada la presencia del oficialista Martín Insaurralde y se duda de la participación de Sergio Massa. Pero los empresarios buscaron desmarcarse de la escena y aclararon que se trata de una elección de medio término que no influirá en el rumbo económico. Así le dijo a este diario el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), José Urtubey.

El economista en jefe de Deutsche Bank, Gustavo Cañonero, afirmó que la preocupación empresaria es la “planificación en todo punto de vista con una gran incógnita que es la inflación y la incapacidad de hacerle frente”. En este sentido, la encuesta de D’Alessio reveló que los empresarios consultados demandaron una “revisión impositiva en un contexto de reglas de juego claras y mejor financiación”.

Así, todos coincidieron en ver más allá de las circunstancias electorales y resolver en el mediano plazo los problemas que limitan la competitividad a las firmas argentinas.

Los empresarios esperan que el próximo semestre sea “levemente peor”

17-10-2013 Así lo indicó una encuesta realizada entre empresarios que fue presentada este jueves en el 49 Coloquio de IDEA. Entre los principales problemas que afectan la competitividad, señalan los impuestos, el tipo de cambio y la inflación

Los empresarios que participan del seminario de IDEA en esta ciudad consideran que el próximo semestre va a ser “levemente peor” que el anterior y vislumbran que seguirá la caída de rentabilidad de sus compañías.

Así lo indicó la Encuesta de Expectativas de Ejecutivos que realizó la consultora D-Alessio-Irol entre los socios del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) y que se presentó en el 49 Coloquio.

La encuesta realizada durante este mes arrojó 46 puntos, cuatro puntos por debajo de la media, que indica una situación “igual”, en una tabla que llega a 100.

Los resultados muestran una leve pérdida de confianza respecto del semestre anterior que fue calificado con 47 puntos.

Mientras que el 25 por ciento de los consultados señala que a la economía le va a ir entre mejor y mucho mejor, el 39 por ciento considera que se mantendrá igual, mientras que el 36 por ciento evalúa que estará entre moderadamente peor y mucho peor.

Las diferencias se concentran en la base de las opiniones, ya que en el semestre que terminó 6 por ciento dijo que le fue mucho peor, mientras que ese grupo sube a 8 por ciento cuando se mira el semestre que está por delante.

El problema de los empresarios se concentra en la pérdida de rentabilidad de sus negocios, ya que solo el 23 por ciento considera que mejorará mientras que el 41 estima que seguirá cayendo.

La mitad de los empresarios considera que los principales factores que afectan a la competitividad de sus negocios son los impuestos, el tipo de cambio y la inflación, en ese orden.

En tanto que al ser consultados sobre provisión de gas, solo 31 por ciento considera que es “adecuada”, 26 ve que es “algo deficiente”, 19 por ciento “muy deficiente” y 4 por ciento dice que es “inexistente”.

En materia de electricidad, solo 19 por ciento dice que es “adecuada”, el 45 por ciento es “algo deficiente”, 24 “muy deficiente” y 1 por ciento la califica de “inexistente”.

Por otro lado, en promedio las empresas dicen que invertirán tan solo el equivalente al 11 por ciento de su facturación, según informó DyN.

Preocupa a empresarios la pérdida de rentabilidad

Por Liliana Franco, enviada especial a Mar del Plata.- Los empresarios estiman que continuarán perdiendo rentabilidad al tiempo que no se muestran muy optimistas respecto a como será la situación económica del próximo semestre, según surge de la Encuesta de Expectativas de Ejecutivos que realizó la consultora D’Alessio-Irol entre los socios del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) y que se presentó en el 49º Coloquio que se realiza esta ciudad.

El 36% de los encuestados estiman que la situación económica será moderadamente peor y mucho peor contra un 39% que estima que no habrá grandes cambios en función de cómo se desempeño la marcha de la economía este semestre. La encuesta realizada durante este mes arrojó 46 puntos, cuatro puntos por debajo de la media, que indica una situación “igual”, en una tabla que llega a 100 mostrando una leve pérdida de confianza respecto del semestre anterior que fue calificado con 47 puntos.

La pérdida de rentabilidad de sus negocios es un tema preocupante ya que solo el 23% considera que mejorará mientras que el 41% estima que seguirá cayendo.

Cuando se les pregunta a los empresarios respecto de cuáles son los temas más importantes y los desafíos para su negocio en 2014, el 55% marca la problemática de los salarios y un 39% la retención de talentos, problema que ha disminuido -paso de 46% el año pasado a 39%- mostrando que no existe tanta rotación de personal, como explico el economista Luis Secco.

En tanto, los factores principales que afectan la competitividad de la empresa el 50% se lo adjudica al peso de los impuestos; un 49% el tipo de cambio, el 47% la inflación y el 37% los salarios. Un 30% de los empresarios consultados apunto también a la calidad institucional.

En tanto que al ser consultados sobre provisión de gas, solo 31% considera que es “adecuada”, 26 ve que es “algo deficiente”, 19 por ciento “muy deficiente” y 4% dice que es “inexistente”.

En materia de electricidad, solo 19% dice que es “adecuada”, el 45% es “algo deficiente”, 24 “muy deficiente” y 1% la califica de “inexistente”. Aunque, estas respuestas hay que enmarcarlas en que el 60% de los entrevistados “son empresas de servicios”, como explicó Eduardo D’Alessio.

A pesar de que la capacidad instalada está en un nivel muy alto con un 80%, la inversión que los empresarios piensan destinar es un 11% de la facturación.

Con una presión impositiva que alcanza más del 40% del PBI y la imposibilidad de ajustar por inflación, los empresarios demandan revisión impositiva en un contexto de reglas de juego claras al tiempo que piden mejor financiación.

El 40% de las empresas cree que caerá su ganancia

Esperan que siga esa tendencia en los próximos seis meses; impuestos, tipo de cambio e inflación, las principales causas

Por Darío Palavecino  | LA NACION
MAR DEL PLATA.- Todo seguirá igual hasta abril próximo. O casi, ya que para la mayoría de los empresarios, y salvo pequeños matices, no se prevén cambios relevantes en la situación económica durante el próximo semestre, un escenario al que se proyecta casi calcado a idéntico período evaluado en mayo pasado.

La tradicional Encuesta de Expectativas de Ejecutivos que realiza la consultora D’Alessio IROL se presentó ayer durante el 49° Coloquio de IDEA y dejó algunos datos relevantes. Por un lado, el repetido reclamo del sector privado para que se eliminen impuestos distorsivos, una política fiscal proinversión y la clarificación de reglas de juego. Por otro, cuatro de cada diez empresas anticipan una eventual prolongación de la caída en su rentabilidad que dicen estar afrontando como consecuencia de la política económica.

La medición permite confirmar además que, en promedio, las empresas están operando al 70% de su capacidad y estiman que durante 2014 destinarán a la inversión el 11% de su facturación anual. “Estamos ante un período muy plano, con un amesetamiento en términos de expectativas”, resumió Eduardo D’Alessio, responsable de la consultora que recabó datos entre 206 ejecutivos socios de IDEA.

Según los indicadores, la evaluación del período mayo/octubre está apenas por encima de las proyecciones que habían plasmado en la encuesta anterior. “La expectativa da cuenta de que no se esperan cambios en el corto plazo”, señaló Luis Secco, economista que participó de la presentación del estudio. Con porcentajes bastante modestos, el patrón predominante en las respuestas destaca que se esperan para el año próximo muy leves repuntes tanto en exportación como en ventas.

Los ejecutivos confirmaron que en los planes de inversión para el próximo año sobresale la búsqueda de nuevos mercados, innovación de productos e incorporación de maquinaria. “Hay incentivos a partir de un dólar barato”, dijo Secco.

Pero para promover la inversión dejaron en claro demandas muy similares a las que habían planteado aquí mismo hace un año. Apuntaron a los impuestos distorsivos (en particular, Ganancias) y pidieron políticas que los tienten a volcar capitales al desarrollo de sus empresas.

Cuando se les consultó sobre tres factores fundamentales que afectan las condiciones de competitividad para sus empresas, las respuestas fueron muy coincidentes: impuestos, tipo de cambio e inflación, seguidos muy de cerca por los salarios. “Se sienten afectados en particular por componentes macroeconómicos, ajenos a sus empresas”, destacó Secco. También pusieron la cuestión salarial al tope de los desafíos para sus negocios en 2014.

Otra queja contundente se refiere al acceso a servicios financieros. Seis de cada diez consultados afirmaron que es restringida o nula la chance de tomar un crédito tanto de entidades privadas como públicas. Mayor aún (67 y 68%) se plantea la imposibilidad para hacer lo propio en bancos de desarrollo o en el mercado de capitales.

En términos de empleo, el 54% de los consultados considera que en el próximo semestre no habrá variaciones en el mercado laboral, lejos del 28% que cree que puede darse una leve mejora y el 17% que cree que habrá pérdidas leves o significativas de puestos de trabajo.

La mayor inquietud en este tema es por las dificultades de tomar personal calificado, admitida por casi el 90% de los encuestados.

Queja de bancos por la presión impositiva

El piso 12° del hotel Sheraton fue el lugar que la banca extranjera agrupada en ABA eligió para reunirse con dirigentes de la Asociación Bancaria y repasar los números del sector. Allí, el presidente del Banco Santander Río, Enrique Cristofani, estimó que “por cada punto de aumento de la presión tributaria, se resignan 0,2 de crecimiento”. Y afirmó: “La presión impositiva subió más de 13 puntos en los últimos diez años, llegando en la actualidad a cerca de 38% del PBI”.

El sector tiene una rentabilidad de 25%, pero “si se ajusta por inflación, apenas conservamos el patrimonio”, dijo un ejecutivo. El encuentro fue convocado por el presidente de ABA, Claudio Cesario.

Expectativas para 2013 y 2014

Buen final, mejor inicio

“Los ejecutivos consultados no prevén mayores cambios en la situación económica del próximo semestre”, es el resumen de la encuesta realizada por la consultora D’Alessio IROL en el 49°Coloquio de IDEA. Según los números presentados ayer, el 64 por ciento de los empresarios prevé el próximo semestre –de noviembre de este año a abril del próximo– una situación igual o mejor respecto del período anterior. En referencia al semestre anterior, la evaluación arrojó una situación real mejor a la prevista en el anterior relevamiento. De todos modos, los directivos apuntan a una pérdida de rentabilidad y cuestionan los costos salariales.

Pese a los rezongos que plantean en los pasillos del Coloquio, al momento de hacer sus pronósticos son menos pesimistas.

El economista Luis Secco, ex mano derecha de Miguel Angel Broda, hizo una curiosa interpretación; los buenos resultados de la encuesta se deben al optimismo típico “por el cambio de estación –el verano– y la euforia del Mundial (sic)”. Casi la mitad de las empresas consultadas espera incrementar sus ventas en 2014. En relación con el empleo, de cada diez consultadas, tres esperan incorporar personal, cinco mantener la actual nómina y sólo dos disminuirla. “Se prevé además un ligero aumento de las exportaciones y la inversión”, señala el trabajo. En cuanto a los factores que –sostiene– afectan la rentabilidad, remarcan el tipo de cambio, la inflación y los salarios.

Al momento de explicar los factores de crecimiento del año próximo, los empresarios apuntan a la diversificación de productos y servicios (37 por ciento), abaratamiento de los costos (32), logro de alianzas estratégicas (27), inversión en tecnología (24) y procesos de reingeniería (24). En cuanto a las medidas que consideran necesarias para promover la inversión, los consultados apuntan a la eliminación de impuestos distorsivos, política fiscal proinversión, reglas de juego claras, financiamiento de largo plazo, recomposición de costos laborales, eliminación de bolsones de competencia desleal y renegociación con los organismos.

Los ejecutivos ven un 2014 con mucha facturación y poca ganancia

18/10/2013

Sorpresas en la encuesta de ejecutivos:la provisión de energía y la pérdida de competitividad, relativizadas. Escasa generación de nuevo empleo.

Mar del Plata. Los ejecutivos no prevén mayores cambios
en la situación económica del próximo semestre, es decir, después de las elecciones parlamentarias del domingo 27, aunque sí advierten mayoritariamente que la rentabilidad de las empresas cae o, cuanto menos, permanece estancada.

La tradicional encuesta de “Expectativas de ejecutivos”, que realiza la consultora D’Alessio IROL y que se difunde en el marco del Coloquio Anual de Idea, exhibe resultados para el último semestre “algo superiores a los previstos” y contiene varias sorpresas.

A criterio de los analistas, este horizonte positivo marca que el empresariado tiene una percepción de la macroeconomía diferente de lo que efectivamente les ocurre puertas adentro de sus compañías.

Los datos del estudio son en cierto modo sorpresivos en varios aspectos. Uno de los más polémicos es el vinculado con el cepo cambiario y las dificultades del comercio exterior.

“La falta de exportación proviene más de las estrategias locales e internacionales (de las compañías) que de la falta de competitividad. Casi el 40 por ciento de las empresas pueden reemplazar las importaciones por oferta local”, dice, llamativamente, una de las conclusiones.

Luego, el economista Luis Secco, quien acompañó a Eduardo D’Alessio en la presentación, consideró que la palabra “pueden” podría reemplazarse por “deben”. “No podemos saber hasta qué punto las empresas están obligadas a sustituir sus importaciones por bienes nacionales”, dijo.

El estudio de expectativas se efectuó en octubre a través de encuestas online sobre 206 ejecutivos asociados a Idea, entidad que congrega a las empresas argentinas de mayor estructura, volumen de facturación y de distintos rubros.

Para el próximo semestre, posterior a las elecciones, el 39 por ciento de los ejecutivos espera una situación igual, otro 22 la califica como moderadamente mejor y el tres por ciento como mucho mejor.

Cuando se les pregunta por las perspectivas para los próximos 12 meses, entre el 40 y el 54 por ciento de los ejecutivos dijo que no se modificará la situación en materia de exportaciones, inversión, ventas y empleo. Es más, una tercera parte de los encuestados dijo que la actividad aumentará “moderadamente”. Pero este clima está lejos de crear empleo de forma masiva. De cada 10 empresas, cinco no modificará sus estructuras de recursos humanos y tres incorporará gente.

La contrapartida al man­tenimiento del volumen de actividad y de facturación está
en la rentabilidad, indicó D’Alessio. El 77 por ciento de los consultados asegura que las ganancias no se modificarán (36) o disminuirán.

La capacidad instalada aparece claramente como un cuello de botella para recuperar rentabilidad. En esa línea, el nivel de inversiones previsto se ubica en el 12 por ciento promedio como porcentaje de la facturación anual para 2014, valor similar al del último año.

Otra sorpresa que deparó el relevamiento fue qué lugar tiene la provisión de energía dentro de las preocupaciones empresariales. En un esquema de 10 ítems, aparece como penúltima. Primero están claramente los salarios, luego la retención de talentos, la falta de crédito, las tarifas y el acceso a la tecnología, entre otras.

La explicación es que “la mayor parte del sector privado ya sustituyó a otro costo y que incide en la rentabilidad”, indicó D’Alessio. Sin embargo, en la lista de factores que pegan en la competitividad, la energía también está penúltima.

El primer factor de pérdida de competitividad señalado por los ejecutivos son los impuestos, luego tipo de cambio, inflación, salarios, calidad institucional, acceso al crédito, mano de obra, tecnología y acceso a la materia prima. La logística, está última.

Los riesgos de la cultura Power Point

Eduardo L. D’Alessio, Presidente D’Alessio IROL

La enseñanza de los transbordadores para las empresas

La NASA aporta una lección para los hombres de negocios sobre los riesgos de la cultura del Power Point, donde se maneja gran volumen de información, pero con poca profundidad.

 El Columbia

En enero de 2003 el transbordador Columbia iniciaba una misión de rutina.  Al momento del despegue, 760 gramos de espuma se desprendieron y golpearon el filo de su ala izquierda. Doce días después de reintegrado a la atmosfera, el transbordador se desintegró.  Pero, ¿cómo pudo suceder esto?

Durante el trabajo previo al despegue, los técnicos abocados al proyecto realizaron un análisis y plasmaron sus conclusiones en una presentación realizada en el programa Power Point. Del mismo se desprendía que el riesgo de accidentes durante el lanzamiento era bajo y se desechó la posibilidad de verificar  daños a través de un satélite espía.  El resultado: el desastre.

Tras el incidente se formó una comisión investigadora denominada Columbia Accident Investigation Bold (CAIB) que analizó, entre otras cosas, el Power Point usado como base para las decisiones.

Sus conclusiones han sido muy bien analizadas por Edward Tufte, especialista en estadística y diseño de información e interfaces. Y también, un vehemente detractor de las presentaciones en Power Point,  por las limitaciones de su formato que –según él- tiene más de estético que de científico.

El informe final de la CAIB es lapidario. La conclusión es que la cultura del Power Point imperante en la NASA llevó a:

·         Consignar información  fragmentaria

·         No profundizar aspectos  fundamentales

·         Confundir términos cotidianos con científicos (significant)

·         Contradicciones entre títulos y 6 niveles de sub puntos

·         Utilizar deficiente notación científica por las limitaciones del mismo software.

Del análisis del Power Point empleado palabra por palabra se infiere que prácticamente todas sus afirmaciones podrían tener más de una lectura y muchas ellas inducían  a conclusiones que aparentemente correspondían a la sucesión de afirmaciones anteriores, pero que en realidad implicaban más una corazonada o conclusión intuitiva que una concatenación de hechos científicos.

La conclusión y recomendación de la CAIB es que el Power Point no es apropiado para presentaciones técnicas y científicas y recomienda emplear informes tipo Word con cuadros, gráficos, textos y notaciones científicas adecuadas.

Las consecuencias del uso erróneo de este software es que se tomaron decisiones que culminaron con la pérdida de siete vidas humanas y 450 millones de dólares.

 

La cultura del Power Point

Con esta base, y siguiendo el análisis de  Tufte,  se abre la reflexión sobre la cultura del Power Point. La misma no se encuentra sólo en la notación, los gráficos y los colores, sino en la costumbre que  se ha generalizado en las empresas de ver mucha información, pero en forma superficial. El poder que posee quien elabora el Power Point  va más allá de lo que  seguramente imaginaron los constructores de la moderna cultura de la organización.

El avance del Power Point ha arrollado a su paso la antigua tradición de elaborar informes en los que los especialistas de cada área podían  profundizar, analizar y sobre todo establecer su espíritu crítico respecto a las consecuencias de cada uno de los hechos objetivos que los informes contenían.

Es cierto que para llegar a una conclusión es necesario contar con todos los hechos, sopesarlos, meditar las relaciones causa-consecuencia y obtener una conclusión de lógica formal. Es en la elaboración de estas conclusiones que se logran los elementos para la adecuada toma de decisiones.

El análisis tradicional requiere profundidad, soledad y reflexión. Cada profesional analiza los aspectos pertinentes a su área y una reunión entre pares lleva a la interacción lógica para obtener conclusiones adecuadas.

Esta tradición ha sido reemplazada por la cultura del Power Point, en la que la totalidad de información pre digerida, sintetizada y en atractiva presentación es presentada de forma simultánea a un conjunto de individuos dentro de la organización. Allí,  los hechos se mezclan con sus consecuencias aparentes y las conclusiones obvias. En general, lo que hace la audiencia es atender a la lógica aparente de dicha concatenación y concluir en las decisiones normalmente que surgen en forma explícita e implícita, pero siempre en forma obvia. Esta técnica es justamente lo que llevó al desastre del transbordador Columbia.

 

Para reflexionar

La pregunta obvia es si las decisiones tomadas en las empresas a través de las presentaciones, muchas veces multitudinarias realizadas en Power Point, muchas veces elaboradas como síntesis de distintas vertientes, conduce a determinaciones lógicas y optimas para la organización, o  si nos acercan al destino fatal de aquellos desdichados tripulantes cuando regresaban a la atmosfera. Tal vez, la cultura de reuniones entre múltiples áreas con información necesariamente superficial merezca ser revisada.

Como reflexión final, en los últimos años se ha venido observando fehacientemente una pérdida de atención. Es lo que denomino: el peligro P+B (Power Point+Blackberry). Si adicionalmente a las limitaciones de la técnica antes mencionada se le suma que varios de los presentes en las reuniones alternativamente, en lapsos significativos, alternan la visión sobre la exposición principal  con el análisis de los datos recibidos en sus Blackberrys y en muchos casos con furtivas respuestas a los mensajes recibidos, el resultado es un cocktail que para las organizaciones puede ser letal.

 

Nora D’Alessio, conferencista en el XIII Felaban CL@B 2013

Nora D’Alessio, vicepresidente de la consultora D’Alessio IROL,  será conferencista en el XIII Felaban CL@B 2013, que se desarrollará entre el  11 y el 13 de septiembre en Miami, Florida.

La presentación “Accionistas, Directivos, Clientes: La alineación de los planetas”, que tendrá lugar el viernes 13 de septiembre, presentará las conclusiones de una investigación que revela como sinergizar los esfuerzos para lograr el éxito de las innovaciones.

El congreso, organizado en el hotel  Intercontinental, contará con 650 participantes de al menos 30 países y la presencia de 100 instituciones financieras.

Felaban CL@B es una conferencia anual que congrega a ejecutivos de instituciones financieras responsables de la administración y el control de riesgo y la gestión operativa en las distintas áreas del negocio financiero. También, reúne a funcionarios a cargo de la implementación de sistemas de información, diseño y automatización de procesos. Su propósito es actualizar conocimientos sobre innovaciones y tendencias a través de presentaciones y demostración de productos por reconocidos expertos internacionales.

Para más detalles de las conferencias:

http://www.clab2013.com/index.php

Eduardo D’Alessio diserta en el 5º Encuentro Anual IDEA PYME

         Eduardo D’Alessio, presidente de la consultora D’Alessio IROL, disertará el  miércoles 11 de septiembre en el panel “Evolución y proyección del negocio: Resultados de la Encuesta de Expectativas PyME”, en el marco del 5º Encuentro Anual IDEA PYME. La exposición será realizada junto con Dante Sica, director de Abeced.com.

         En el encuentro se analizarán los resultados de una encuesta realizada con empresarios de pequeñas y medianas empresas acerca de producción, ventas, exportaciones, inversión, empleo y desarrollo general del negocio.

      Las actividades de la jornada de IDEA PYME, bajo el título  “Innovación y Desarrollo”, tendrán lugar en el Auditorio Buenos Aires, Avenida Pueyrredón 2501, barrio de Recoleta.

          Para mayor información sobre el encuentro, actividades y horarios, consultar el programa en: http://ideared.org/contenido/482/Programa_Encuentro_PYME