Internet: un canal de ventas que no se cae

El estudio `Perfil del usuario argentino de Internet` arroja que 68% de los usuarios de la Argentina no redujeron su consumo online, pese a la crisis. Acciones de seguridad para vender aún más.

1 uso de Internet resiste todos los embates de la realidad local. En un contexto en el que los argentinos disminuyen todos sus consumos, el 68% no reduce el uso de Internet. Así lo determina el informe realizado por

D´AIessio IROL para Certisur SA. A fines de 2018 había 33,4 millones de argéntinos que accedían a Internet, es decir, el 75% de la población del país, un 10% más que en 2017. De ellos, el 90% ya hizo alguna compra on line: más de 30 millones de argentinos compraron en Internet y su perfil ya no se limita solo a los jóvenes. Además, se observa que a medida que aumentan las compras on line, disminuye el temor a usar Internet como negocio virtual. ¿Cómo se puede aprovechar aún más esta gran vidriera virtual? Conocer cómo usan Internet y cuáles son los temores de los argentinos es un buen inicio para, luego, actuar en consecuencia. EL E-COMMERCE El 72% de los más de 30 millones de argentinos que ya compraron on line lo hizo desde un smartphone. Esta es una tendencia marcada a medida que aumenta el nivel socioeconómico de los usuarios. Por lo tanto, es muy recomendable que los sitios web destinados a vender tengan un diseño `responsive`, es decir, que sean accesibles desde diferentes dispositivos, con diversos tamaños de pantalla. Y que en todos se visualicen correctamente.

Por otro lado, la gran mayoría -el 96%- de los usuarios que hicieron alguna compra on line tiene entre 35 y 44 años y pertenece al nivel socioeconómico Alto. Los usuarios de los niveles socioeconómicos Medio y Bajo están rezagados en cuanto al e-commerce. Y esto representa un gran desafío (y una gran oportunidad) para las empresas: cómo captar a esos potenciales consumidores.

Las barreras que aún persisten para el comercio electrónico son las mismas de siempre, aunque su incidencia va decayendo. En 2018, los frenos más importantes de los ciber compradores fueron la desconfianza en las claves de seguridad que usan (33%), el haber tenido o escuchado experiencias negativas (33%), el desconocimiento del software de seguridad (26%), y la falta de confianza en los medios de pago (8%). LA SEGURIDAD ON LINE Aunque el temor a navegar por Internet está en declive, aún hay cierta percepción de riesgo. Los principales recelos son el hackeo de la cuenta (58%), el robo de identidad (52%) y que se acceda a la información sobre los hábitos y los sitios visitados (37%). No obstante, contradictoriamente, un 54% manifiesta que no le robaron sus datos personales y un 51% afirma que nunca lo hackearon ni usaron sin permiso sus datos.

La mayor percepción de seguridad la tienen las empresas de tarjetas de crédito y los bancos: el 57% de los ciber usuarios asegura que ellas `están continuamente trabajando para evitar el hackeo de cuentas`. Por lo tanto, un buen ejercicio para empresas más pequeñas sería observar qué herramientas y acciones utilizan esas grandes compañías para generar ese nivel de seguridad entre quienes usan Internet, y tratar de replicarlas.

Hay que tener en cuenta que los ciber usuarios no son muy aplicados a la hora de usar herramientas de seguridad. En promedio, mencionan seis medidas de seguridad pero sólo utilizan tres para proteger su información personal: un 83% asegura que cambia sus contraseñas en forma regular, un 36% afirma que verifica la existencia del candado de seguridad en cada sitio web al que ingresa, y un 32% asegura que solamente ingresa a sitios `seguros`. No obstante, todas estas medidas de seguridad han experimentado una caída en 2018 con respecto a años anteriores.

Y otro dato a considerar es que el 51% de los usuarios de Internet considera que el sitio web es el responsable de la seguridad en la web. Solo un 27% estima que también hay una responsabilidad propia. Esta percepción obliga a las empresas a profundizar sus herramientas y acciones de seguridad, y comunicarlas fehacientemente, para que los usuarios -y potenciales consumidores- se sientan más seguros. LAS OPORTUNIDADES En este momento, mientras todo baja, Internet permanece en alta. Por lo tanto, no hay que dejar pasar la ocasión de aprovechar esta circunstancia.

El informe que D´Alessio IROL realizó para Certisur SA destaca que el 29% de los usuarios se animó a realizar algo nuevo en Internet en el último año. Y la buena noticia es que principalmente hizo operaciones en donde está involucrado manejo de dinero: compras, ventas y transacciones.

Además, el mismo estudio concluye que si los usuarios se sintieran más seguros en Internet harían más compras on line. Concretamente, realizarían en promedio cuatro tipos de transacciones más, especialmente compras con tarjetas de crédito y débito (53%), pago on line de compras (49%). pago de servicios on line (44%) y operaciones de home banking (41%).

Pero ¿cómo perciben que un sitio web es seguro? El 52% se siente seguro cuando debe usar un password para acceder, un 47% se fija en que el certificado de seguridad esté muy visible y un 49% afirma que la seguridad se la da el haber visitado u operado con anterioridad el sitio web.

Con estos datos, las pymes tienen herramientas para optimizar su presencia on line y conseguir más ventas. FICHA TECNICA Nombre: Perfil del usuario argentino de Internet Muestra: 1968 casos (mayores de 18 años) Técnica: Cuestionario semi-estructurado Fecha: Octubre de 2018 Cómo creció el acceso En millones Año 2000 O

1 millón 33,´+ millones de argentinos tienen acceso a Internet 75% de los argentinos accede a Internet

El uso de Internet en la Argentina Sobre 1.968 casos, mayores de 18 años, todos usuarios de Internet. Datos a octubre de 2018. Más de 30 millones de personas ya compran on Une. La mayor parte usa su smartphone para comprar. Y un tercio de los usuarios se animó a hacer algo nuevo en Internet en el último año: especialmente hicieron operaciones de manejo de dinero.

90% compra on Une

usa smartphone para pagos y compras on Une En compras Sobre 90% que compra on Une ¿Quiénes compran más? Hasta 34 años

87% De 35 a 44 años De 45 a 54 años

88% 55 años y más 88% 96% compra on Une

¿Qué medios de pago usan?

Del 100%,

22% 20%

19%

Hace transferencia Usa tarjeta Paga en

bancariade débitoefectivo

Fuente: D´Alessio IROL para Certisur SA

de los usuarios 49% dijo que Internet les mejora el humor habitualmente.

de los usuarios no 68% Q redujo su consumo de Internet en el contexto económico argentino.

Compra on Une 10% Transacciones 10% Entretenimiento Trabajo / Cursos Otros Los qué mas se animaron Por género Por edad

23% 55 y más

26% Entre 45 y 54

35% Entre 35 y 44

33% Menor de 34 Por ubicación caba22% GBA23% Interior del país 34% Mujeres 34% Varones 24%

En operaciones bancarias Los argentinos perciben algunos riesgos de seguridad en Internet y se sienten más seguros al mover dinero on Une que al navegar (sea desde una PC o un smartphone).

Hackeo de cuentas

Robo de identidad

Pérdida de privacidad

Olvidar el password

¿Qué más harían si se sintieran más seguros en Internet? Sobre el total de usuarios encuestados.

53% y Compraría on Une

Pagaría on Une sus 49 compras con más frecuencia Pagaría servicios ¿,0/ online ¿Cómo elige un sitio seguro? Para entrar se usa un password Ya lo usó antes

Es muy visible el certificado de seguridad Está respaldado por institución financiera (Visa, Mastercard)

76% se siente seguro para mover dinero on Une

68% se siente seguro al navegaren Internet

Transacciones en móviles

Más del 70% de los usuarios de teléfonos móvil utiliza aplicaciones para hacer operaciones electrónicas y siete de cada 10 asegura que está seguro al mover dinero en línea, según un estudio de la compañía Certlsur y la consultora D´AlessIo IROL. El primer resultado generallsta del estudio asegura que la cantidad de usuarios de Internet creció este año 10% hasta los 33 millones de personas únicas, lo que representa 75% de la población.

Publicado en La Gaceta el 19/11/2018

Comienza la puja entre Hillary y Trump: ¿a quién prefieren los argentinos?

Se esperan cien millones de espectadores, sólo en los Estados Unidos. Es el primero de los tres debates programados. Clinton llega con una leve ventaja en las encuestas. ¿Y por casa, a cuál de los dos queremos para presidente de ese país?

Se sabe que los debates televisivos tienen una larga tradición en los Estados Unidos y se sabe también que pocas veces definen la suerte de una elección. Pero ante una contienda tan reñida como la de este año, la mirada de todos los analistas internacionales está puesta en el primer enfrentamiento televisado entre Hillary Clinton y Donald Trump.

“La expectación es extraordinaria. Se esperan más de cien millones de telespectadores, una audiencia equiparable a la final de la Superbowl o a los últimos episodios de series como MASH en 1983 (106 millones). A esto hay que añadir los espectadores en el resto del planeta. Porque el debate Trump-Clinton es un acontecimiento planetario”, ilustra el diario español El País

Las últimas encuestas de opinión le dan un pequeña ventaja a la candidata del Partido Demócrata, pero como la distancia entre los dos se reduce día tras día los diseñadores de la campaña de Hillary están todo el tiempo al borde de un ataque de nervios y los tres debates televisados se convierten en tres escalas claves en el camino hacia la Casa Blanca.

El millonario y xenófobo Trump llega a los debates televisados con la ventaja de ser un conocedor del medio: fue el conductor durante varias temporadas de un exitoso reality show, El Aprendiz, en que varios participantes concursan para conducir un proyecto en alguna de las compañías del empresario.

La esposa de Barack Obama, el presidente saliente, atacó ese flanco del candidato republicano. Michelle Obama dijo días atrás durante un acto en Virginia, que “ser presidente no es nada parecido a un reality show” y añadió: “No se trata de enviar tuits insultantes o dar discursos incendiarios, se trata de si el candidato es o no quien puede manejar la enorme responsabilidad de dirigir este país”.

Y continuó: “Si un candidato es errático y amenazante; si un candidato trafica en el camino con los prejuicios y los miedos; si un candidato no tiene planes claros para poner en práctica sus objetivos; si ellos faltan al respeto a sus conciudadanos, incluyendo a gente que hizo extraordinarios sacrificios por nuestro país; déjenme decirles, que ellos son así y es la clase de presidente que serán, créanme”.

Es que justamente, Trump convirtió a la campaña presidencial en su propio reality, el más importante de su vida, para llegar a dirigir la potencia más grande del planeta. Lo hizo mediante declaraciones que buscaron provocar la reacción y que le dieron prensa. Lo mismo que hace cualquier protagonista de un reality que busca sobresalir.

“La historia nos indica que, para un candidato que se encuentra a cuatro puntos, sería difícil aprovechar una excelente actuación en un debate para ganar en noviembre. Es lo que Trump necesita. Pero una ventaja de cuatro puntos significa que incluso un cambio de dos puntos en cualquier dirección es significativo. Es lo que marca la diferencia entre una noche electoral bastante cómoda para Clinton y algo mucho más incierto”, opinó el analista político John Sides.

El debate de de hoy fue programado para coincidir con el 56 aniversario del primer debate presidencial televisivo que se realizó en Estados Unidos: el mano a mano entre un joven, bronceado y relajado John F. Kennedy y un sudoroso y nervioso Richard Nixon. Está organizado en seis segmentos de 15 minutos cada uno y los tres temas que dispararán la discusión serán “La dirección de Estados Unidos”, “Alcanzar la prosperidad” y “Garantizar la seguridad de Estados Unidos”.

El debate de esta noche se realizará en la Universidad de Hofstra, a las 22 de la Argentina, y será transmitido por la cadena NBC. Durará 90 minutos y no tendrá tandas publicitarias. El domingo 9 de octubre se realizará el segundo, que transmitirán las cadenas CNN y ABC en la Universidad Washington de St Louis, Missouri. El tercero se verá por Fox News diez días después, en la Universidad de Nevada, en Las Vegas.

EN LA ARGENTINA

Según el reciente estudio Medición de Septiembre del Tracking de Humor Social y Político, que hacen D’Alessio IROL y Berensztein, a nivel local hay un “masivo apoyo de la población argentina a Hillary Clinton”

Preferencias locales.

Entre las razones por las que los argentinos desean queClinton gane las elecciones se destacan: “porque es demócrata”, “porque es progresista”, “está inclinada a nuestra región”.

Sin embargo predomina las posiciones adversas a Trump: “es el mal menor”, “Trump es peligroso”, “Trump es un problema para el mundo entero”, “Trump es un machista xenófobo”, “es todo lo malo del espíritu yankee”. Se trata de una muestra onlina a 350 personas mayores de edad de todo el país.

Cuando se pregunta las razones para votar al candidato republicano las respuestas son: “para que termine con los problemas de inmigración, “para salir del establishment”, “es sincero”, “es un cambio”, “mano dura”, “piensa primero en los americanos y después en los extranjeros”.

Crece la tendencia de llevar a cabo las entrevistas laborales por videollamada

El 80% de los encuestados las consideran una herramienta útil

Hoy muchas empresas eligen realizar una primera entrevista a través de conversaciones online, según se desprende de una encuesta de D´Alessio IROL para Gestión Compartida. Sin embargo, entienden que lo que se gana en practicidad se pierde en la calidad de datos que se pueden obtener. Las opiniones favorables son compartidas tanto por los más jóvenes como por las personas de mediana edad.

El avance de la tecnología ha impuesto que las entrevistas online sean cada vez más comunes y que ya no se circunscriban necesariamente a los casos en que el candidato y el empleador están en países diferentes o a cientos de kilómetros de distancia. En estos casos, el entrevistado no sólo debe conocer las características y necesidades de la empresa a la que se postula, sino que debe adecuar sus conocimientos a este nuevo formato. El equipo de RR.HH. de Gestión Compartida brindó consejos para dar una buena impresión y entender la dinámica de las entrevistas virtuales.

Al igual que en una conversación cara a cara, hay que mirar a los ojos de la otra persona al hablar con ella. Por eso, al estar sentado frente a la pantalla conviene siempre ver a la cámara para dar esa impresión y mantener la naturalidad del contacto.

El problema es que al tener en pantalla la propia imagen habrá una tendencia a mirar lo que se está mostrando y no al entrevistador, lo que debe evitarse.

La realidad es que no se está acostumbrado a “venderse mediante una computadora”. Para adquirir práctica es recomendable pedirle a un amigo o familiar que realice preguntas fingiendo una entrevista, para poder practicar cómo desenvolverse en una charla virtual.

El espacio físico de fondo en la entrevista es uno de los detalles más importantes. El lugar debe tener una correcta iluminación y no mostrar desorden. El silencio es otro factor determinante para la elección del lugar.

Como en toda entrevista, se debe planificar lo que se usará para la ocasión. El vestuario debe ser adecuado al puesto que se anhela. La postura es importante: hay que sentarse con la espalda recta y bien apoyada en el respaldar. Unos minutos antes hay que comprobar que la conexión a Internet sea correcta, que la computadora funcione bien al igual que la aplicación por la cual se hará la videollamada. El espacio físico de fondo tiene que estar bien iluminado, silencioso y en perfecto orden. Una escena cada vez más común gracias al avance de la tecnología.

Pagos móviles: la revolución que se viene

El banco a través de la PC tenderá a quedar desplazado completamente por la banca móvil. Todo pasará por el teléfono y los bancos tienen que adecuarse a los tiempos que corren, con inversión en tecnología.

La tecnología y los bancos tienen aún una batalla importante que librar en la Argentina. Es la revolución de la “Banca Móvil” que viene algo demorada en el país, pero cuenta con todos los ingredientes necesarios para fortalecerse en el corto plazo e instalarse definitivamente como el “modus operandi” del futuro.

La penetración de la telefonía celular y del uso de internet es mayor en la Argentina que en otros mercados de la región. Sin embargo, el país está rezagado en lo que es el uso del mobile banking. Se estima que ya hay 29 millones de usuarios de smartphones, además que el 90% de los teléfonos vendidos en el último tiempo cuentan con este tipo de tecnología. En cambio, la venta de computadoras está en franco retroceso desde el año 2013. Así, los especialistas no dudan en asegurar que la clave para el crecimiento y desarrollo del negocio bancario de los próximos años entra en la palma de una mano.

Y detrás del desafío para los bancos se abre una gran ventana de oportunidad para las empresas de tecnología que hacen posible que las operaciones móviles se materialicen. Así lo entiende Marcelo Fondacaro, Director Comercial de VeriTran. “La banca móvil es la llave de entrada para una mayor inclusión financiera. Para llegar con productos bancarios no solo al tope de la pirámide que ya está hiperbancarizada, sino a los segmentos en los que la relación con el banco se limita solamente a la cuenta sueldo y la tarjeta de débito”.

Fondacaro pone la mirada incluso más allá, en ampliar fronteras, y llegar al uso del celular como medio de pago. “Los pagos móviles serán una segunda revolución en lo que es la banca digital y hacia ahí nos encaminamos”. “En la actualidad hay 1.5 millones de usuarios de banca móvil en la Argentina, pero creemos que ese número va a crecer rápidamente y durante los próximos 12 meses algunos bancos tendrán más usuarios de Banca Móvil que de Home Banking”, proyecta el ejecutivo durante una entrevista con Estrategas.

¿Qué es exactamente el mobile banking?

El teléfono móvil es el único canal transaccional que está disponible para el cliente las 24 hs, en la palma de la mano, y es uno de los tres elementos personales más esenciales, junto a la billetera y las llaves. Están presentes en casi toda la población bancarizada y en amplios sectores de la no bancarizada. Según datos de eMarketer, se estima que habrá 30,7 millones de usuarios de teléfonos móviles para fines de 2015, lo que representa una tasa de penetración del 70,6%. Frente a esto, los bancos tienen el desafío de brindar soluciones que puedan adaptarse a esta plataforma replicando y mejorando la experiencia de usuario que puede obtenerse a través de la web. El mobile banking es un servicio que permite realizar todas las operaciones necesarias, como pagar, transferir, extraer o consultar el saldo a través de sus dispositivos móviles.

¿Está preparado el mercado local para este cambio de modelo del que usted habla?

Desde el lado de los bancos, estamos convencidos que están tratando de utilizar tecnologías disruptivas, es decir innovaciones tecnológicas que en algún momento van a reemplazar a otros canales. Creemos que pueden dar un salto tecnológico para tener más clientes por menores costos y mejor atención. La banca móvil está en la mano de cada individuo, entonces éste es un cambio de modelo que incentiva la inclusión financiera. En cuanto a los usuarios, hay que hacer escuela, hay que explicar el sistema y sobre todo trabajar sobre la percepción de seguridad. Pero no hay que equivocarse y subestimar la capacidad de la gente de entender la tecnología.

¿La coyuntura económica le pone un freno a este proceso de modernización

No, no es una cuestión de coyuntura económica. Invertir en mobile banking es más barato que abrir una sucursal nueva. Los bancos son rentables y pueden hacerlo. Hay entidades financieras que lo han hecho y recuperaron en tres meses la inversión. La decisión de avanzar en este cambio tiene que ver con el mercado, con la competencia entre bancos que en este momento está muy quieta. Sin embargo ya se empezaron a hacer cosas. Hay que tener en cuenta también que hay una cuestión cultural que se debe modificar y eso no se puede hacer al mismo tiempo que se cambia la infraestructura. Es decir, primero tengo que invertir para que la tecnología esté disponible y a partir de ahí hacer escuela, para trabajar en la educación de los futuros usuarios.

¿De qué inversión hablamos y cuántos bancos en la Argentina están comenzando con ese proceso?

La inversión en mobile banking es el canal que ofrece mejor retorno de inversión frente a otros canales bancarios como cajeros automáticos, sucursales, call center. Además, se puede desplegar aún más rápido que el resto de los canales, es más segura y económica. En la Argentina los bancos tanto públicos como privados ya están evaluando como evolucionar su plataforma de banca móvil para llegar a los pagos móviles y billetera digital.

TRANSACCION MAS BARATA

La banca móvil tiene la ventaja de llegar a un universo mucho más amplio de personas. En ese sentido, y comparado con su antecesor, el home banking o internet banking ¿Abre un abanico más grande de negocios para los bancos que lo desarrollen?

Si. La gran oportunidad pasa por desarrollar los pagos móviles. Esa será una gran revolución. Además hay una cuestión de costos. Para los bancos una transacción a través del móvil es diez veces más barata que a través de internet banking. El mercado de pagos mueve a nivel mundial 20 billones de dólares, se puede ganar tanto por bajar costos para el adquirente, por disminuir el fraude, como también por nuevas oportunidades de negocio por ejemplo retiro de dinero sin tarjeta (en Argentina lo ofrece Red Link , conocido como “Retiro Punto Efectivo”) o permitir a una persona que no tiene tarjeta de crédito pagar en un e-commerce.

Es un desafío grande, porque involucra todo un cambio cultural… ¿Cómo se logró en otros países desarrollar con éxito este nuevo nicho de negocios?

La clave es que la aplicación pueda ser usada por todo tipo de teléfonos móviles y que sea de muy bajo o ningún costo para el usuario. Es decir, la aplicación debe ser pequeña, de poco peso, para que no le consuma el saldo prepago a quien la va a utilizar, cada transacción debe ser muy liviana. Por ejemplo, a quien haga un pago desde su cuenta bancaria la operación debería costarle cero pesos de operación telefónica. De la misma manera, para el comerciante que recibe ese pago. Hoy hay modelos que cobran 4,9% de la transacción, y esos modelos se llevan hasta un cuarto de la ganancia del comercio (POS móviles). Otro dato importante para que se consolide es que funcione para los hiperbancarizados y para los que solo tienen una cuenta universal, o incluso para los que tienen la tarjeta SUBE. Que puedan presentar su teléfono en un comercio y pagar con el saldo de la tarjeta. De esa manera se está alcanzando a la base de la pirámide y se arma un ecosistema de pago. La aplicación tiene que ser sencilla de usar, ese también es un punto importante porque si el usuario entra y ve que es muy compleja, que no es amigable, la borra y no la utiliza más.

El temor al fraude siempre es un freno para la aceptación por parte de los usuarios de estas nuevas herramientas. ¿Es seguro operar a través de un teléfono?

Las operaciones que se realizan a través de los celulares tienen una seguridad mayor que a través de internet banking, porque los teléfonos ya de por sí implementan mecanismos de seguridad y protección de claves, y esto sumado con nuestra tecnología donde todos los datos están cifrados, genera que el intercambio se realice con un nivel de seguridad muy elevado. Además, otra funcionalidad que se tiene a través de este dispositivo es la posibilidad de generar un software token para autentificar las transacciones. Esta solución reemplaza a los hard token o la tarjeta de coordenadas, que es menos sofisticada y menos segura, porque los datos pueden ser copiados y replicados mediante una foto. En el caso del software token en cambio, el celular genera una clave dinámica diferente para cada transacción y la trasmite para autentificarla. Por otro lado, permite realizar lo que llamamos firma de transacciones, que no sólo valida la autenticidad del usuario, sino también del monto y el destinario.

En la Argentina, ¿cómo es la experiencia que hay hasta el momento?

Actualmente hay 1,5 millones de personas que entran a través de su dispositivo móvil y hacen alguna transacción que por el momento son muy sencillas, como consultas de alguna transferencia. El crecimiento que se espera es de 50% anual de cantidad de usuarios y los datos que difunde el Banco Central también abonan esas proyecciones. Según los últimos informes el uso de las vías digitales para operaciones bancarias en el primer trimestre de este año creció un 47% respecto al mismo periodo del año anterior.

Datos que marcan tendencia 

·       A nivel mundial, en los próximos cuatro años, el número de usuarios de banca móvil llegará a los 1.800 millones de personas, representando así más del 25% de la población mundial, según se desprende del Informe Global de la Banca Móvil realizado por KPMG a partir de datos de la encuesta suministrados por UBS Lab Evidencia.

·       En la región el 70% de los latinoamericanos no están bancarizados según un artículo desarrollado por Latin Trade Group en el año 2012. En nuestro país específicamente, una encuesta realizada por la consultora D’Alessio IROL, asegura que en la Argentina existen cerca de 9 millones de personas no bancarizadas, es decir, que no son titulares de una cuenta o tarjeta de crédito.

·       Una encuesta mundial de banca digital elaborada por PwC señala que los usuarios de banca móvil aumentarán este año un 64%. En cambio, en los canales tradicionales como las sucursales y la banca telefónica, los usuarios caerán un 25% y un 13% respectivamente.

“Es como tener un granito, casi no te das cuenta de que lo llevas”

Lo dice Nicolás Batsios, un porteño de 33 años que hace cuatro meses se implantó dos chips, uno en cada mano.:
“Hace 4 meses me puse dos implantes NFC. La sensación es similar a un granito en cada mano. Al principio es extraño, lo tocás a cada rato, pero en unas pocas semanas ya casi no te das cuenta de que lo llevas metido bajo la piel”, cuenta Nicolás Batsios, un porteño de 33 años que se sumó a la tendencia.
“El chip viene dentro de una jeringa, que hace de aplicador. Yo no me animé a inyectarlos, me daba impresión, así que le pedí a un amigo que me ayudara. Es apenas un pinchazo”, recuerda. Para aquellos que tienen aprensión a insertar este chip bajo la piel, también hay anillos y piercings que cumplen la misma función.
Como Batsios se dedica a la seguridad informática, investigó durante varias semanas cúal era el mejor y lo encargó a un vendedor de China. “Yo los utilizo como método de autenticación, para agendar información y guardar claves. Pero puede servir también para abrir puertas o guardar tu historial médico. Y si sufrís un accidente, el médico que te atiende podría saber, con solo apoyar un lector en tu mano, tu tipo de sangre y si sos alérgico a determinados medicamentos o tu obra social. Lo podés programar desde la computadora o el celular”, detalla.
En nuestro país Batsios es un pionero, pero no es el único. Un estudio de la consultora D’Alessio IROL, sobre una base de 380 argentinos, refleja que si bien no todos están dispuestos a instalar uno de estos chips en su cuerpo, no hay dudas de que se trata de una tecnología que llegó para quedarse. Ante la pregunta si aplicarían un chip subcutáneo a sus hijos, 7 de cada 10 personas evaluarían la posibilidad. La mitad de los consultados lo haría para monitorear cuestiones relacionadas con la salud. La mayoría lo haría para almacenar sus datos médicos. La otra razón más elegida sería para poder rastrearlo, por si se pierde o lo secuestran. Además, tres de cada 10 personas evaluarían la posibilidad de utilizar chips como localizador, ante la posibilidad de ser víctimas de un secuestro.
Pero sólo la mitad de los encuestados se lo implantaría.

Crece el uso del home banking en el 2015

La aparición masiva de internet hace unos veinte años transformó progresivamente la vida en sociedad, proveyendo nuevos usos que mejoran la eficiencia y facilitan operaciones que solían ser tortuosas.
Uno de esos beneficios se relaciona con las operaciones bancarias y financieras. Actualmente, un alto porcentaje de las transacciones habituales puede realizarse on-line, lo que permite ahorrar tiempo, evitar la utilización del papel (reduciendo el impacto ambiental) y mejorar la seguridad, al no implicar la circulación de billetes para operaciones cotidianas.
De a poco, hasta los usuarios más tradicionales dejan a un lado sus prejuicios y entienden estos beneficios.
Según un estudio realizado por D’Alessio IROL para Certi Sur dado a conocer esta semana, en el 2015 el 86% de los usuarios en Argentina accede a sus cuentas bancarias y realiza operaciones de pago, depósito o crédito mediante la web.
El número implica un importante crecimiento respecto del año anterior, cuando el 75% de los consultados utilizaba el canal electrónico.
El estudio explica que las principales barreras que los clientes expresan antes de comenzar a utilizar el servicio suelen relacionarse con el temor respecto de la seguridad de introducir datos confidenciales en la web, principalmente los relacionados a la identidad o a los números de cuenta, y que los mismos sean hackeados o robados para bases de datos.
Sin embargo, los miedos desaparecen al utilizar los canales electrónicos por primera vez, una vez que comprueban la seguridad actual de los sistemas de datos, y disfrutan los beneficios.

Aumentaron el uso del home banking y las compras online en la Argentina

El 86% de los usuarios realizaron operaciones bancarias online y un 90% compró algún artículo vía internet, indicó un estudio privado. El 50% de los encuestados puede mencionar alguna experiencia negativa cercana.

La comodidad, practicidad y ahorro que ofrecen las operaciones online continúan conquistando adeptos en la Argentina, donde creció de 75% a 86% la cantidad de personas que realizaron transacciones bancarias online entre 2014 y 2015.

Así lo sostiene el informe Seguridad en Internet realizado por D’Alessio Irol a pedido de Certisur.
Junto con el home banking crece la cantidad de usuarios de e-commerce: 90% de los encuestados realizó alguna compra en 2015, por encima del 84% que respondió de manera afirmativa en 2014.
Seguridad, la clave
Los mayores miedos de los internautas relacionados a la seguridad en internet residen en el malware, el robo de identidad, de contraseñas, de datos de tarjetas de crédito o claves de acceso y el software espía. Más allá de estos temores, internet es considerado hoy en día un medio seguro, pero en el que hay que moverse con precauciones.
El 89% reconoce que hay riesgos y el 50% puede mencionar una experiencia negativa cercana, aunque la mención de experiencias negativas con la web registró una baja más significativa que la percepción de riesgos.
En el caso del e-commerce, el principal temor para no emplearlo se vincula con la falta de seguridad que los usuarios perciben de internet en general, y el temor a tener inconvenientes con la compra en cuanto a la falta de entrega y reclamos.
El estudio destacó que existe un crecimiento en las medidas adoptadas respecto de la navegación y la interacción con desconocidos. Por ejemplo, la utilización de páginas seguras creció 11 puntos (71% 2015 vs. 60% en 2014), no abrir correo no deseado 7 puntos (57% 2015 vs. 50% en 2014), no intercambiar archivos con desconocidos 13 puntos (73% 2015 vs. 60% en 2014) y no permitir el acceso de desconocidos a la máquina personal 6 puntos (66% 2015 vs. 60% en 2014).
Qué harían con más seguridad
La encuesta, realizada sobre 1.000 casos, estableció que un 53% de los usuarios de internet realizaría compras online con tarjeta de crédito si se les pudiera garantizar más seguridad. Un 48% pagaría servicios online; 45% operaría mediante home banking; 44% concretaría compras en internet; 29% escribiría su número de tarjeta de crédito; 23% dejaría datos personales en varias páginas; y 22% intercambiaría información confidencial.
“La tecnología que las empresas han adoptado y el esfuerzo de los proveedores de seguridad para mantenerse actualizados se ven reflejados en la percepción que los usuarios tienen en esta materia. Esto también implica una gran responsabilidad, ya que la confianza que se pone de manifiesto no puede ser defraudada”, explicó Norberto Marinelli, CEO de CertiSur.

Crece a 86% el volumen de usuarios que realiza acciones de home banking Argentina

Un 60% de la población argentina está conectada a Internet y aprovecha la Web para hacer trámites, entre ellos operaciones de home banking. Y la operación bancaria online crece. Según el estudio sobre ?Seguridad en Internet: la visión de los usuarios 2015?, de D´Alessio IROL elaborado para CertiSur, en 2015, el 86% de los encuestados utilizó Internet para transacciones bancarias, en comparacióncon 75%, en 2014.Sin techoOtro segmento que aumenta su peso es el e-commerce.

El reporte destaca que un 90% de los encuestados respondieron afirmativamente a la pregunta si compraron alguna vez por Internet (contra 84% que lo habían hecho en 2014). En este sentido, Internet sigue creciendo en la percepción como medio seguro. “Es considerado como tal, dentro de una sociedad insegura. Todavía no vemos un techo. Hay mucha gente que aún no compró y se van reduciendo los temores”, afirmó Nora D’Alessio, directora de D’AlessioIROL, en la presentación del informe de la que participó IT Business.

No obstante, todos los players reconocen que la percepción de los riesgos es alta. Al respecto, el informe resalta que un 89% de los usuarios reconoce que existen riesgos y que el 50% puede mencionar una experiencia negativa cercana, propia o de algún conocido (el principal inconveniente es el ingreso al e-mail personal). “Hay mayor inconsciencia entre los menores de 50 años, que no esperan preocuparsepor su seguridad, sino más bien, que haya alguien que los proteja”, mencionó D’Alessio.

Entre los mayores miedos de los internautas se acomodó en primer lugar la propagación de virus (67%), seguido por el robo de contraseñas (53%) y el robo de identidad (47%). Estos miedos, sumados el robo del número de las tarjetas de crédito o los fraudes electrónicos, registraron una disminución respecto de 2014. No defraudar la confianza.

Para Norberto Marinelli, CEO de CertiSur, el gran desafío de la industria pasa por mantener esa percepción de medio seguro que tienen los usuarios en la actualidad. “El uso de Internet continuará creciendo, así como lao harán las transacciones. Por eso, lo que las plataformas de este tipo deben garantizar es la seguridad de los datos”, especificó Marinelli.

Entre las medidas adoptadas respecto de la navegación y la interacción condesconocidos, en la comparación 2015 contra 2014, la utilización de páginas seguras creció 11 puntos (71% contra 60%), no abrir correo no deseado, 7 puntos, (57% contra 50%), no intercambiar archivos con desconocidos, 13 puntos (73% contra 60%) y no permitir el acceso de desconocidos a la máquina personal, 6 puntos, (66% contra 60%).