Cinco encuestas y la duda del momento: cómo está hoy la imagen de María Eugenia Vidal

La gobernadora sintió el impacto de la crisis económica. ¿Puede blindarse o su suerte está atada a la de Macri?

El incidente de este lunes llamó la atención de la propia víctima. María Eugenia Vidal sintió en primera persona el descontento de un maestro de Morón, que se negó a sacarse una foto con ella. No es la primera vez que sufre un desplante de un docente en un acto de este tipo. Alguna vez la han increpado y hasta insultado. Pero entonces, la gobernadora lo atribuía 100% a la pelea política con el gremio. Ahora no. Cree que hay un fastidio genuino en la gente que afecta su imagen. La duda es cuánto.

Para aproximarse a una respuesta, Clarín analizó cinco encuestas de diferentes consultoras. La coincidencia es casi unánime. La caída sostenida del presidente Mauricio Macri desde fines del año pasado, con pequeños oasis intermedios, le está pegando como pocas veces a la gobernadora. Sin embargo, sigue siendo la dirigente mejor ponderada no sólo de Cambiemos sino, en general, de toda la política. Pero un límite empezó a correrse y enciende un alerta en la Provincia: aún liderando los rankings de imágenes, en algunos Vidal ya tiene más imagen negativa que positiva.

Este es el resumen de los sondeos:

1) D’Alessio IROL / Berensztein

Un trabajo de 1.477 casos en todo el país. La gobernadora aparece con un 53% de imagen positiva, la más baja en toda la serie que presenta la consultora, desde septiembre de 2016. A ese mismo piso de 53 puntos había caído en diciembre de 2017, cuando se discutió la reforma previsional.

Pese a la caída, Vidal queda segunda en una tabla diversa de 19 dirigentes. En junio sólo la supera el ex ministro de Economía Roberto Lavagna, ya casi un outsider de la política. Macri, en cambio, queda 12 puntos abajo de su gobernadora, que supera a Cristina por 23.

2) Opinaia

Un trabajo nacional de 3.108 casos en todo el país. En junio se produjo un quiebre y la gobernadora pasó a tener más imagen negativa (-53%) que positiva (47%). Un retroceso respecto a mayo, cuando mostraba +51% y -49%.

Aun así, en una tabla comparativa con otros 17 dirigentes (desde Macri hasta Tinelli), Vidal sigue teniendo la mejor imagen positiva. Al senador peronista Miguel Pichetto, último de la lista, le saca 22 puntos.

3) Ricardo Rouvier & Asociados

Este consultor, que midió muchos años para el kirchnerismo, presentó un sondeo nacional de 1.200 casos. Tiene a la gobernadora con 52 puntos de imagen positiva y 38,1 de negativa. Casi los mismos números de mayo. Bastante buenos, pero los más bajos desde que comienza la medición, a principios de 2017.

Vidal supera claramente aquí a los otros dos dirigentes medidos: el presidente Macri y la ex Cristina Kirchner. Ambos quedan con diferencial en rojo (más imagen negativa que positiva).

4) Hugo Haime & Asociados

Este consultor, que trabaja desde hace décadas para el peronismo, presentó una encuesta de 1.000 casos en todo el país. Con datos de imágenes, pero también de intención de voto. Es uno de los que viene midiendo la alternativa de Vidal como candidata a presidente.

En cuanto a la imagen, la gobernadora mantiene aquí más números positivos (47,9%) que negativos (-44,6%). En una tabla con otros 10 políticos, en el diferencial la supera el salteño Juan Manuel Urtubey, aunque con mayor nivel de desconocimiento.

También Haime le atribuye a la gobernadora buenas cifras electorales. Vidal aparece con mejor intención de voto que Macri para presidente (18,6% contra 14,8%). Es su punto más alto desde que en septiembre del año pasado el consultor empezó a evaluarla para ese cargo.

5) Circuitos

Es una consultora chica, que mide en la provincia de Buenos Aires. Su último trabajo fue un relevamiento de 955 casos. Vidal todavía figura con más imagen positiva (42,4%) que negativa (-40,5%).

Aunque cuando se evalúa su gestión, el diferencial queda en rojo. Para el 42,5% su gestión es “buena” o “muy buena”, mientras que para el 44,1% es “mala” o “muy mala”.

Mejor que Mirtha, peor que Messi

Clarín también publicó días atrás un interesante estudio sobre credibilidad. Un trabajo nacional de Taquion / Trespuntozero, de 2.275 casos, que evaluó en este rubo a políticos, artistas y figuras como el Papa.

Allí, en un escenario de escepticismo generalizado (sólo a Messi y Francisco son más los que les creen que los que no les creen), Vidal figura primera entre los políticos y supera a dos conductores: Mirtha Legrand y Marcelo Tinelli.

Respecto al futuro político de la gobernadora, en Cambiemos hay un par de conclusiones coincidentes. Si bien se mantiene arriba de Macri, la suerte de Vidal está bastante atada a la del presidente. Sobre todo si no repunta la economía. Y la única idea electoral hoy es que tanto Macri como la gobernadora (y también Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad) vayan por la reelección de sus cargos, sin ningún gambito sorpresivo.

Publicado en Clarín el 17/07/2018

La gestión nacional, con opiniones negativas entre los cordobeses

Según D’Alessio Irol/Berensztein, el 51% considera que es mala o muy mala. Por primera vez, son más altas que las positivas. La gobernadora Vidal es la dirigente con mejor imagen, y le siguen Carrió y Macri.

Por primera vez desde que se la mide, la evaluación sobre la gestión del Gobierno nacional es mayoritariamente negativa entre los cordobeses.

Según el último informe de Humor Social y Político de la consultora D’Alessio Irol/Berensztein, para el 51 por ciento de los encuestados la evaluación de la gestión del Gobierno nacional en su conjunto es mala, mientras que para el 47 por ciento es buena.

Hasta la medición de mayo pasado, las calificaciones positivas eran superiores a las negativas.

El pico se registró en septiembre de 2017, el mes previo a las elecciones legislativas nacionales, cuando el 73 por ciento de los cordobeses encuestados consideraba la gestión como buena, y apenas el 25 por ciento la veía mala.

En octubre y en noviembre, continuó en niveles positivos muy altos, pero en diciembre se produjo una caída intermensual de 10 puntos porcentuales en las opiniones favorables (pasó del 69 al 59 por ciento) y un crecimiento de 13 puntos en las desfavorables, que subieron del 26 al 39 por ciento.

La caída coincide con el inicio de la disparada en el precio del dólar y con el impulso en la inflación. En mayo pasado se produjo otra baja intermensual importante en las opiniones positivas, que pasaron del 56 por ciento en abril al 50 por ciento.

Y volvió a caer cuatro puntos más entre mayo y junio, para llegar al 47 por ciento actual. En esos dos meses, las opiniones negativas saltaron del 41 al 51 por ciento.

Nuevamente, los cambios bruscos coinciden con otra corrida cambiaria y con fuertes aumentos en los precios.

El estudio distingue la opinión de quienes fueron votantes de Cambiemos en el balotaje de 2015. En octubre, las opiniones positivas sobre la gestión del presidente Mauricio Macri llegaban al 92 por ciento. Las negativas eran de tan sólo el ocho por ciento.

Pero en junio las positivas bajaron al 64 por ciento y las negativas se elevaron al 33 por ciento.

En tanto, para quienes votaron a Daniel Scioli en el balotaje, la opinión sobre la gestión de Macri es mala para el 94 por ciento y buena para apenas el cinco por ciento. En noviembre del año pasado, se dieron los picos inversos, con 69 por ciento de calificaciones negativas y 24 por ciento positivas.

La consultora también preguntó si creían que la política gradualista del Gobierno fue acertada: el cuatro por ciento respondió por el sí en su totalidad; el 37 por ciento consideró que sí, en algunos aspectos; para el 23 por ciento no, mientras que para el 31 por ciento no hubo gradualismo.

Acuerdo con el FMI

Otra punto de la encuesta de D’Alessio Irol/Berensztein fue sobre el acuerdo alcanzado para la asistencia financiera del Fondo Monetario Internacional (FMI).

El 23 por ciento de los encuestados consideró que era la mejor opción; el 25 por ciento dijo que era la única opción, mientras que para el 39 por ciento fue la peor alternativa. En este último grupo está el 91 por ciento de quienes votaron por el Frente para la Victoria en 2015, mientras que en las dos primeras fueron mayoritariamente votantes de Macri.

Acerca de los efectos del acuerdo con el FMI, la consultora preguntó si de esta forma se evitará una crisis mayor. El 19 por ciento consideró que “sí, seguramente”; el 32 por ciento “sí, probablemente”; el 10 por ciento “no, probablemente” y el 33 por ciento “no, seguramente”.

Los cordobeses se expresaron mayoritariamente también sobre que la oposición debe acompañar para alcanzar las metas del acuerdo con el FMI (55 por ciento). El 27 por ciento consideró que debe oponerse y el 13 por ciento dice que debe mantenerse al margen.

Imagen y posicionamiento

Tres dirigentes de Cambiemos siguen siendo los líderes políticos con mejor imagen positiva en la provincia de Córdoba.

La gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, sigue primera con el 61 por ciento, seguida por Elisa Carrió (56 por ciento) y Mauricio Macri (52 por ciento). No obstante, se trata de la cifra más baja desde que se los mide, es decir, desde julio del año pasado.

Los tres dirigentes tuvieron su pico en septiembre del año pasado: Vidal alcanzó el 76 por ciento, Carrió el 71 y Macri el 70.

Los que peor imagen tienen son Daniel Scioli (13 por ciento), el senador Miguel Ángel Pichetto (18 por ciento) y Cristina Fernández de Kirchner (24 por ciento). No obstante, se trata de los picos más altos de imagen positiva de estos dirigentes del kirchnerismo.

Si se considera el balance (imagen positiva menos imagen negativa), Vidal tiene 25 puntos, Carrió 17 y Macri 10. En cambio, Scioli llega a -69, Pichetto a -49 y Cristina a -47 puntos.

Datos técnicos de la encuesta

Medición on line de junio de 2018. Respuestas de 498 encuestados residentes en la provincia de Córdoba.

Siete de cada diez empresarios asegura estar peor que el año pasado

El 68% de los ejecutivos sondeados en la encuesta de D’Alessio IROL para IDEA, afirmó que el primer semestre fue peor al anterior.

El dato es revelador. Siete de cada diez empresarios consultados afirma que la situación de su negocio empeoró durante el primer semestre del año, aunque el 51% espera una mejora en la segunda mitad del año, según un sondeo privado.

Bajar el gasto público, controlar la inflación, generar confianza y credibilidad, y tener un plan económico claro son las mayores recomendaciones realizadas al Gobierno por los ejecutivos consultados.

Así surge de la encuesta de expectativas realizada entre compañías asociadas al Instituto de Desarrollo Empresarial de la Argentina (Idea) presentada en la sede de la entidad.

De este modo, se revirtió totalmente el optimismo récord que habían mostrado en la encuesta anterior, cuando el 68% de los ejecutivos encuestados afirma que en el primer semestre del año le fue peor que en el período anterior.

En el Coloquio de Idea 2017, llevado a cabo en octubre, una semana antes de la victoria del Gobierno en las elecciones legislativas, la encuesta mostró que el 76% de los sondeados creía que la economía iba a mejorar en el primer semestre del año.

“Los resultados están alejados de las expectativas. Hubo mucho optimismo y los resultados no fueron los esperados”, admitió Eduardo D´Alessio, presidente de la consultora, al presentar el trabajo.

La encuesta se realizó entre la segunda y la tercera semana de junio, cuando la mayor parte de la devaluación ya se había concretado.

La falta de una estrategia para controlar la inflación, la devaluación, la caída del nivel de actividad, la baja del consumo, la falta de inversión, las elevadas tasas de interés y la escasez de crédito son algunos de los puntos negativos recogidos por la encuesta.

El trabajo fue realizada por D´Alessio Irol en junio entre 230 ejecutivos socios de Idea.

A la hora de evaluar los “aciertos y desaciertos” del Gobierno, los ejecutivos cuestionaron la política comunicacional, mientras que también hubo críticas hacia los problemas para controlar el gasto público y la inflación en el corto plazo.

La industria es la que en mayor medida ha sentido el impacto de una disminución en su nivel de operaciones.

En tanto, el sondeo arroja que los niveles de inversión está por encima del promedio de los últimos ocho años.

Entre los temas clave, la reforma impositiva es el más mencionado en el caso de la industria, mientras que salarios es el más relevante para servicios.

La baja de inflación surge nuevamente como una cuestión preponderante para la competitividad.

Además, Justicia y educación son señalados como los grandes temas para que el país crezca.

Al Gobierno se le reconocen especialmente sus esfuerzos para lograr la apertura del país al mundo y las intenciones positivas por la obra pública.

Publicado en Diario 26 el 11/07/2018

Los empresarios esperan un segundo semestre positivo

230 ejecutivos socios de IDEA respondieron la encuesta online. Pese a la percepción adversa del primer semestre, hay expectativas de recuperación.

La encuesta de Expectativas de Ejecutivos realizada por D´Alessio IROL para IDEA (Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina)  muestra que para el 68% de los encuestados, la  situación económica del primer semestre es moderadamente peor o mucho peor que la situación en octubre de 2017. Solamente  el 15% de las personas respondieron favorablemente. Por otro lado, al ser consultados sobre las perspectivas para el resto del año, el 51% respondió que será moderadamente mejor o  mucho mejor.

Cabe señalar que los aspectos de mayor impacto positivo están marcados por una apertura al mundo. Mientras que la devaluación del peso muestra aspectos tanto negativos como positivos.

En lo que se refiere a las exportaciones,  las modificaciones cambiarias pueden contribuir a mejorar las expectativas. El 43% de las empresas que exportan consideran que verán incrementos en esta actividad. Además, una quinta parte de los consultados confían en incrementar las inversiones (23%).  Dicho aumento está centrado en las empresas medianas (32% aumentará en las medianas contra un 20% en las grandes).  También,  un tercio de las compañías consultadas espera subas en sus ventas. Quienes mejores expectativas tienen son las pequeñas, ya que un 42% los espera.

Al ser preguntadas sobre lo que creen que sucederá con el empleo en su empresa dentro de 12 meses, la mitad de las empresas considera que no tendrán mayores cambios en temas de empleo. De hecho, un 19% espera incrementar su dotación. Así mismo, una tercera parte de los encuestados espera mejoras en su rentabilidad (30% en sector industrial y un 24% en servicio).

Un aspecto negativo a diferencia de otros años es que en lo que va de 2018, aumentó la capacidad ociosa de las empresas. En 2017 era de un 27% y ahora es de un 38%.  Al mismo tiempo, los niveles de inversión están encima del promedio de los últimos 8 años.

Otro punto consultado fueron los temas más importantes a tratar para el próximo año. Para la industria, el tema vital es la reforma impositiva, mientras que para las empresas de servicios son los salarios. Pero también, el Dr. Eduardo D’Alessio destacó la importancia que tienen para las empresas la retención de talentos y la atracción de personal idóneo.

Otras respuestas para destacar de los 230 ejecutivos socios de IDEA fueron la necesidad de bajar la inflación como tema preponderante para la competitividad y que haya más justicia y educación para que el país crezca. Asimismo, señalaron que el Gobierno tuvo algunos aciertos como fue la apertura del país al mundo o las inversiones en la obra pública. Pero se le recrimina las fallas a las hora de comunicar.

Por último, en la encuesta de Expectativas de Ejecutivos realizada por D´Alessio IROL para IDEA se estima que en el corto plazo es necesario que se logre controlar el gasto público y la inflación. A esto hay que sumarle la necesidad de reforzar la confianza. En cuanto al largo plazo, se requerirán mayores inversiones en infraestructura.

A todo esto, el economista José Siaba Serrate subrayó la necesidad de tomar con cuidado las expectativas y esperar a futuro para ver qué pasa.  “Es un período de ebullición con muchas preguntas sin responder por parte del Gobierno”, agregó.

Publicado en Fortuna Web el 11/07/2018

Empresarios esperan mejoría en el segundo semestre pero baja de rentabilidad

Consideran que la reforma impositiva es vital para los negocios. La comunicación y la conformación del equipo económico, los mayores errores del Gobierno.

El optimismo empresario chocó contra la realidad económica. La percepción de los ejecutivos para el primer semestre fuela más alta en los 22 años que D Alessio Irol realiza una encuesta junto al Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA). Pero una vez superado este período, el balance de los ejecutivos es como el célebre “no positivo”. El 68% de los 230 empresarios relevados afirma que su situación está mucho o moderadamente peor en la primera parte del año. Sin embargo, los resultados de la medición de junio arrojan un panorama alentador para los hombres de negocio, ya que más de la mitad (51%) pronostica un segundo semestre mejor. La reforma impositiva es uno de los temas mencionados como vitales para los próximos meses. Además señalan a la comunicación y a la conformación del equipo económico como los mayores errores del Gobierno.

Para los ejecutivos que ven con buenos ojos la performance de los últimos seis meses, los puntos más altos son el acuerdo con el FMI, la reclasificación de la Argentina como “mercado emergente”, la apertura internacional y el aumento del dólar. En cambio, aquellos que evalúan que están en una situación actual “mucho peor” señalan a la inflación, la devaluación, las elevadas tasas de interés y la crisis cambiaria como algunas de las principales causas.

“Hay una percepción adversa del primer semestre, pero existe una expectativa de recuperación”, mencionó Eduardo D’Alessio durante la presentación del informe. Entre los relevados, solo el 25% pronostica un semestre moderadamente o mucho peor, mientras que 2 de cada 10 creen que la performance no cambiará.

La única variable económica en la que los empresarios muestran perspectivas positivas son las exportaciones. El 43% afirma que aumentarán entre moderada y significativamente, lo cual marca un aumento respecto al 31% de la encuesta de octubre de 2017. Esto es producto, de acuerdo al informe, de las modificaciones cambiarias. Solo el 8% señala que disminuirán.

Las expectativas para las ventas y la inversión son menos prometedoras. Una quinta parte de los consultados confía en incrementar las inversiones, especialmente las empresas medianas. En tanto, tres de cada 10 aseguran que disminuirán en los próximos 12 meses. No obstante, la inversión estimada como porcentaje de la facturación anual continúa por encima del promedio de los últimos años.

Respecto a las ventas, un tercio de las empresas espera subas (34%), a diferencia del resultado de octubre de 2017 que arrojaba optimismo en 83% de los relevados. Más del 40% de los ejecutivos prevé que las ventas caigan el año que viene.

La mitad de los ejecutivos (49%) considera que no habrá cambios en materia de empleo. El 19% espera que aumente, en particular las empresas pequeñas y de servicios, mientras que un 32% asegura que disminuirá. En la medición de octubre de 2017, solo el 11% pronosticaban un descenso. Los empresarios también esperan que la rentabilidad de sus compañías acuse recibo de la turbulencia económica. El 48% pronostica una caída para los próximos 12 meses.

Publicado en Marcelo Longobardi el 11/07/2018

Javier Goñi: “La crisis cambiaria generó que el primer semestre fuera peor que las expectativas”

Javier Goñi es el gerente general de Ledesma y el presidente del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA), una agrupación que reúne a más de 200 grandes, medianas y pequeñas firmas.

Ayer se dieron a conocer los resultados de la encuesta que realiza dos veces al año la consultora D’Alessio IROL entre los ejecutivos miembros de IDEA, en donde el 68% de los sondeados admitió que en el primer semestre del año le fue peor que en el periodo anterior. El dato contrastó con el récord de optimismo que habían dado las expectativas para los próximos meses en la encuesta anterior, realizada en octubre pasado.

-¿Por qué hubo tanta diferencia entre las expectativas que tenían los empresarios el año pasado y lo que finalmente ocurrió?

-Sin dudas la realidad fue peor que las expectativas. Pero quiero destacar que la economía venía con un crecimiento bueno al fin del año pasado y con una inercia que todos pensábamos que iba a continuar. Los hechos que dispararon esta crisis cambiaria -que fue la sequía, el tema de las tarifas y el aumento de la tasa de interés en Estados Unidos- hizo que el primer semestre fuera peor que las expectativas. De la encuesta, mirándola en profundidad, rescato que las expectativas para los próximos meses vuelven a ser positivas y eso es interesante. El 51% de los encuestados dice que va a estar mejor, incluso más positivo es el sector de la industria que el de los servicios.

-¿Qué rescata de estos últimos meses y qué le preocupa?

-Entre las cosas que se hicieron bien está el acuerdo con el FMI . La sociedad argentina entendió lo importante que fue el préstamo como seguro para evitar una crisis mayor. Además, que la Argentina haya entrado como mercado emergente es una señal muy importante para el futuro. Por supuesto que a todos nos preocupa la inflación y las tasas de interés, que es importantísimo para la actividad que comiencen a bajar. La devaluación, que si bien por una parte tiene un efecto positivo, al ser tan repentina genera complicaciones. La encuesta refleja lo que está pasando: un primer semestre que estuvo por abajo de lo que se esperaba, pero que se siguen manteniendo las expectativas positivas para adelante. Creo que la cosecha fina que está viniendo para fin de año será buena y eso va a ayudar. Los proyectos con participación pública-privada (PPP), entre lo que es la obra pública y la infraestructura, también van a ser positivos. Además creemos que el consumo mejorará, que si bien no venía de un crecimiento fenomenal, venía creciendo.

-Pero también la encuesta señala que son pocas las empresas que creen que habrá creación de empleo, aumento de ventas y mejora en la rentabilidad.

-Todos sabemos, y lo escuchamos de la palabra del ministro [de Producción] Dante Sica , que tenemos que pensar que en el próximo semestre vamos a tener tasas altas, con inflación y desaceleramiento. Mirando para adelante, veo a fin de año un recupero y un repunte. Si el dólar también se llega a estabilizar, que en estos días pareciera, es una buena señal para tranquilizar a los mercados y para bajar las tasas, porque con estos niveles en los que estamos hoy ningún negocio es viable.

-Y mirando al año próximo, ¿cómo ve el panorama en un año electoral y el objetivo de llegar al 1,3% del déficit fiscal?

-El compromiso del Gobierno de bajar el déficit fiscal es una buena señal para todos. Si se ponen firme en eso y lo hacen en forma inteligente -que creo que está previsto en el acuerdo con el FMI que haya un espacio de contención social por lo que pueda generar la baja del déficit- es una buena señal. Un déficit bajo hará que la Argentina sea más competitiva y permitirá que los empresarios tengamos una mejor previsibilidad. El déficit fiscal, en definitiva, es la madre de todos los problemas. Es bueno que haya una meta estricta y que haya una vocación concreta, que es lo que noté con los ministros con los que hablé estos días y con el llamado a los gobernadores. Creo que el consenso es el camino.

-¿Hubo un cisne negro?

-Fue un cisne negro. El Presidente de hecho lo reconoció el otro día en el discurso por el Día de la Independencia, hay errores internos, no hay ninguna duda, pero se combinó con una serie de factores que no eran esperados. Los mismos errores, con otros factores, hubieran tenido un efecto más atenuado. Combinado con estos factores se generó una mini tormenta perfecta.

-¿Es una buena señal los cambios en el gabinete?

-Es una buena señal. Al ministro Dante Sica lo conozco porque trabajaba con nosotros en IDEA y conoce mucho de industria y es alguien que entiende mucho de la realidad del interior del país. Él dijo que le iba a dar más dinamismo a las políticas y más velocidad. Yo lo veo positivo.

Publicado en La Nación el 11/07/2018

Empresarios, optimistas, creen en recesión corta

ENCUESTA DEL INSTITUTO PARA EL DESARROLLO EMPRESARIAL DE LA ARGENTINA (IDEA)

El primer semestre no fue como esperaban. La crisis del tipo de cambio los sorprendió, pero ahora tienen un optimismo moderado para la segunda mitad del 2018. Confianza en el acuerdo con FMI. O La crisis del dólar que comenzó en abril de este año, y su antecedente inmediato, el cambio de las metas de inflación que anunció el Gobierno el 28 de diciembre, no entraba en las previsiones de nadie. Tampoco lo esperaban los socios del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) quienes según muestra una encuesta realizada por la consultora D’Alessio Irol se equivocaron al proyectar el inicio del 2018. La consulta hecha entre 230 cuadros directivos de empresas socias de la entidad, revela que a fines del 2017 imaginaron un primer semestre entre `mejor` y `mucho mejor` que la segunda mitad del año pasado. Pero en realidad, transcurrido el período fueron vueltos a consultar y dijeron que resultó entre `peor` y `mucho peor`. En cifras, en una escala de 0 a 100 donde SO puntos significa que no hay cambios, pensaron que entre enero y junio de este año la situación iba a ser de7Spuntos, pero en realidad, fue de 31 puntos.

Ahora, el 4% de los consultados cree que el segundo semestre va a ser mejor; el 47% moderadamente mejor, el 24% cree que va seguir todo igual, el 18% cree que va a ser moderadamente peor y el 7% mucho peor. Según indica el informe de la consultora existe entre los empresarios de IDEA un `moderado optimismo`, tal vez, en la línea de las promesas hechas por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y su par de Producción, Dante Sica, de que este año va a terminar con la economía en crecimiento. `Los ejecutivos consultados sostienen una percepción adversa de la situación económica nacional del primer semestre. Sin embargo, confían en una mejora para el resto del año`, señala el informe entre sus conclusiones.

Los empresarios creen que la economía se encamina hacia una recesión corta. Lo inquietante de esta encuesta, que se lleva a cabo desde hace más de 20 años, es que la perspectiva de los consultados empieza a fallar en los períodos de crisis económicas. Mientras las cosas marchan más o menos bien, las evaluaciones sobre el semestre que vendrá y lo que ocurre después coinciden. Pero cuando hay es cenarios complejos parecen entrar a jugar los propios deseos de los participantes. Por ejemplo, durante todo el período que va desde la depresión económica del 2000, la salida traumática del 2001 y la recuperación posterior, las evaluaciones fueron todas equivocadas. Se pensaban escenarios mucho mejores de los que fueron en realidad. Hubo períodos de coincidencia entre 2004 y 2011, y luego se comenzaron a abrir nuevamente. En 2015 las proyecciones y las evaluaciones se volvieron a juntar, hasta ahora, cuando las divergencias fueron muy notorias, de 44 puntos.

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Los que son optimistas sobre el segundo semestre basan su perspectiva en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en la declaración de la Argentina como mercado emergente, en la apertura internacional y en la devaluación que genera competitividad a las exportaciones. En cambio, los que son pesimistas fundamentan su estado en que no se logra controlar la inflación, en la devaluación, y la caída de la actividad, como los tres principales motivos.

Por caso, el informe señala que `las modificaciones cambiarías contribuyen a mejoras en las expectativas de exportaciones: 43% de las empresas que exportan consideran que verán incrementos en esta actividad`.

En cambio, se desmoronan las expectativas de ventas en el mercado interno: 34% creen que subirán entre mucho y moderadamente, 25% piensa que no habrá cambios, y 41% que caerán. El resultado entre respuestas positivas y negativas fue de -7, mientras que el año pasado había sido de+75. `Los ejecutivos sostienen una percepción adversa de la situación económica del primer semestre`.

Publicado en Ámbito el 11/07/2018

Para los empresarios, el primer semestre fue malo pero tienen mejores expectativas para el resto del año

Qué pasó. Aunque el 68% de los empresarios consultados evalúan al primer semestre como “moderadamente peor o mucho peor”, más de la mitad (51%) considera que para el resto del año se experimentará una mejora y “se presenta entre igual y mejor que la situación actual”.

Los datos surgen de la encuesta de Expectativas de Ejecutivos que hace la consultora D’Alessio IROL para IDEA. Para el informe se tomaron datos on line de 230 ejecutivos entre la segunda y la tercera semana de junio, en plena corrida cambiaria.

Los ejecutivos ven un quiebre positivo y entienden que, por lo menos, la crisis no se profundizará. Lejos quedó el optimismo visto en el Coloquio empresarial de octubre en Mar del Plata, en el que la expectativa para el primer semestre de 2018 se proyectaban en 75 puntos. Ese mismo período hoy terminó calificado con apenas 31, la brecha más grande en los más de 20 años en los que se hizo el estudio. El número para el segundo semestre es de 56 puntos sobre 100.

“Lo que piensan los empresarios es que se ha dominado la situación. Tal vez no sus efectos que se van a sentir con la disminución de la actividad económica, que es lo que están esperando, pero que la crisis en sí misma está dominada. Razón por la cual esperan que la situación sea entre igual o algo mejor. No es eufórica la diferencia, pero sí un cambio de tendencia”

Cuáles son los puntos salientes del informe. Los empresarios ven como positiva la “apertura de la Argentina al mundo” que llevó adelante la gestión Macri y prevén una “recuperación de expectativas sobre exportaciones”. Toman como oportuna la decisión de haber pedido de forma rápida ayuda financiera al Fondo Monetario Internacional.

“La industria es quien en mayor medida ha sentido el impacto de una disminución de su nivel de operación”, dice el trabajo. Y agrega que los niveles de inversión “están por encima del promedio de los últimos 8 años”.

Entre los temas que están al tope de las preocupaciones, la industria apunta a la reforma impositiva mientras que el sector de los servicios tiene como principal foco lo que suceda con los salarios en el futuro.

Los hombres de negocios ven como positivos:

  • El acuerdo con el FMI
  • La Argentina como mercado emergente
  • Apertura internacional
  • Sinceramiento económico
  • Aumento del dólar

Y como negativo:

  • La inflación
  • La devaluación
  • La caída del nivel de actividad
  • La baja del consumo
  • Elevadas tasas de interés
  • Déficit fiscal

-¿A qué variables hay que prestarle atención en la próxima encuesta?, le preguntó A24.com a D’Alessio.

-Al nivel de empleo y de ventas en el mercado interno. El nivel de ventas en el mercado internacional creo que está asegurado porque viene una mejor cosecha y porque el tipo de cambio indudablemente hará que disminuyan las importaciones y aumenten las exportaciones. Lo importante es que las familias consuman y que tengan dinero en sus bolsillos.

En tanto, el economista José Siaba Serrate, que estuvo presente en la exposición ante la prensa del informe, consideró que esta es una foto pero habrá que seguir de cerca señales importantes para la evolución de esta mirada empresaria.

Publicado en A24 el 11/07/2018

Para el 70% de las empresas la economía empeoró en el primer semestre

Los empresarios están inquietos por el rumbo de la economía y cada vez son menos los que se guardan las críticas para su fuero interno. A dos años y medio de la llegada de Mauricio Macri a Balcarce 50, los hombres de negocios hacen gestiones para que el gobierno salga a negociar con la oposición para evitar trabas y encaminar su proyecto político económico.

Como prueba más reciente de esa inquietud, el 68% de los 230 empresarios que respondieron a la última Encuesta de Ejecutivos que elabora la consultora D’Alessio Irol a pedido del Instituto para el Desarrollo Empresario (IDEA) consideró que en el primer semestre de 2018 la economía fue entre moderadamente mala y muy mala. A la par, un 17% consideró que la economía no cambió y sólo un 15% habló de un primer semestre entre moderadamente mejor y mucho mejor.

De todos los sectores de la economía, la industria fue el sector de la economía que más afectado salió en los primeros seis meses del año en curso. Pese a las críticas por el mal arranque del año, los consultados se manifestaron confiados en que la tendencia puede mejorar en la segunda parte. El 51% de los consultados prevé que la economía será entre moderadamente mejor y mucho mejor, contra un 25% que espera un final de año entre moderadamente peor y mucho peor.

Pese a que la percepción en general fue mala, los consultados destacaron como temas positivos al acuerdo con el FMI, a la calificación del país como mercado emergente, la apertura internacional, el “sinceramiento económico” y el aumento del dólar.

Entre lo negativo cuestionaron la inflación, la devaluación, la caída de la actividad, la baja del consumo, las elevadas tasas de interés, el déficit fiscal y la “crisis cambiaria”.

Aunque se mostraron optimistas a futuro, sólo una quinta parte de los empresarios consultados por D’Alessio Irol afirmó que invertirá más en el próximo año. De los ejecutivos que respondieron afirmativamente, un 32% pertenece mayoritariamente al segmento de la mediana empresa contra un 20% de representantes de empresas grandes.

Pese a esto, la consultora que elaboró el informe destacó que las inversiones están por encima del promedio de los últimos ocho años. En sintonía con el panorama de las inversiones, la expectativa respecto a las ventas también es moderada.

Según el informe privado, sólo un tercio prevé aumentos de los volúmenes en los próximos doce meses. El 42% de esa fracción correspondió al segmento de las pymes.

En esa línea, el empleo tendrá un año sin cambios para la mitad de los consultados. Sólo un 19% aseguró que prevé ampliar su dotación de personal en los próximos meses.

Los consultados destacaron la “apertura comercial” como uno de los puntos rescatables de la política económica de Cambiemos.

Y si bien plantearon una recuperación de expectativas sobre exportaciones, reconocieron que las posibilidades de que aumenten las inversiones y el empleo se reduce al mínimo de las empresas.

Consultados sobre los temas claves para recuperar el crecimiento, los hombres de negocios clasificaron primero a la reforma impositiva para la industria y a los salarios para las empresas del sector de los servicios. En tanto, la mayoría respondió que la baja de la inflación es crucial para aumentar la competitividad.

Finalmente, los empresarios lamentaron a la comunicación del gobierno como uno de los temas más controvertidos. Y afirmaron que las principales demandas de cara a futuro, además de la inflación, son el control del gasto público y las inversiones en infraestructura.

Publicado en Tiempo Argentino el 11/07/2018

Siete de cada diez empresarios dicen estar peor que en 2017, pero creen que el segundo semestre será mejor

Los datos surgen de una encuesta a 230 miembros de IDEA

Un buen arranque de año. Un segundo trimestre donde la economía retrocedió varios pasos. Y una proyección de que recién al final del último cuarto de 2018 se logren ver datos económicos encaminados otra vez hacia un terreno positivo. Esa es la hoja de ruta que varios analistas del sector privado e incluso de algunos integrantes de económico del Gobierno para lo que queda del año.

Pero una proporción importante del empresariado local parece incluso apostar a más: un 51% cree que el segundo semestre será “moderadamente mejor” o “mucho mejor” que el primero. Así se desprende de una encuesta de IDEA que la consultora D’Alessio IROL realizó en junio entre 230 ejecutivos y empresarios socios del instituto empresario.

La perspectiva se sostiene, entre otras cosas por un grado de recuperación en las exportaciones, inversiones y un sector industrial que espera mantener sus margenes de ganancia o ver un leve crecimiento.

El dato se contrasta con una evaluación de la primera mitad del año que es principalmente negativa, con un 68% opinando que la situación económica durante ese período fue moderadamente o mucho peor que el anterior. Las bases de esa visión negativa se resumieron en las cuestiones como la inflación; las tasas de interés y el acceso al crédito; y la política económica en cuestiones como la crisis cambiaria y la baja del déficit fiscal.

De cara a lo que viene, un 43% de los encuestados esperan que las exportaciones de sus empresas aumenten de forma moderada o significativamente durante el próximo año. El segmento más grande fue el 49% que considera que no verá un cambio en sus exportaciones a lo largo de los siguientes 12 meses.

 Para mejorar la competitividad, consignan los encuestados, es de primordial importancia mejorar en los frentes inflacionarios, impositivos y laborales

En el frente inversor, el grueso de los encuestados sostiene su visión actual o tiene perspectivas de mejora hacia futuro. A pesar del actual clima económico, un 47% no espera modificaciones en la inversión en su empresa, y otro 23% estima que la inversión crecerá moderada o significativamente.

Otro rubro donde la mayoría espera mantener su posición actual o crecer en alguna medida es la rentabilidad empresaria. Un 52% cree que durante los próximos doce meses la rentabilidad de sus empresas quedará igual o mejorará. De los que proyectan un crecimiento en rentabilidad, un 30% pertenecen a empresas industriales.

Lo más importante para tratar

Un aspecto que continúa en boca del sector privado es la competitividad de Argentina respecto del resto del mundo. En ese frente, temas como infraestructura y política de cambio no son los más importantes.

Los encuestados apuntan a lograr una baja de la inflación (64%), la reforma impositiva (59%), y la reforma laboral (47%), como los tres principales ejes sobre los cuales la competitividad argentina se tendrá que basar.

Publicado en Infobae el 11/07/2018