Los chistes ahora van por Twitter y Facebook

En catorce minutos, Tato Bores podía contar qué pasó en Argentina entre 1960 y 1990. Aquellos monólogos del Actor Cómico de la Nación eran motivo de reunión frente al televisor. Pero ya no pasa todo a través de la pantalla chica, ni siquiera con el programa conducido por Marcelo Tinelli, que tuvo que reinventar su formato varias veces a prueba de ensayo y error. Los avances tecnológicos ayudan a divulgar la risa: 61% de los argentinos consultados comparte contenidos por el celu y la tablet, a través de las redes sociales.

Según la encuesta de D’Alessio Irol, el 33% de los consultados comparte material humorístico un par de veces a la semana y el 13% los hace con una frecuencia diaria a través de la red social Facebook y Twitter, y por WhatsApp en sus celulares. El 21% comparte videos graciosos una vez por semana.

Quizás la altísima penetración de estas nuevas plataformas cambiaron la manera de hacer humor. Ahora el chiste se mueve por la red en forma de video y los meme dejaron de ser una rareza. Se trata de construcciones multimedia que se viralizan a través de Internet. La actualidad es lo que alimenta la proliferación de todo tipo de imágenes. La lesión de Neymar en pleno Mundial, la dirección que ofreció el vicepresidente Amado Boudou para fijar domicilio en un lugar de San Bernardo que era puro médano o la salida al mercado del iPhone 6 inspiraron a muchos para crear imágenes que superaban los medios verbales. Así el chiste se volvió jpg.

“Hoy Twitter es revolucionario porque es como tener una revista de humor salvaje que se renueva minuto a minuto. Antes tenías que ir al kiosco cada quince días para conseguir la Revista Humor, por ejemplo. Yo veo mucho talento en Twitter, de hecho aparecieron buenos guionistas. La diferencia ahora es la interacción. Mis oyentes me pasan chistes todo el tiempo y los comparto. Lo sumé a mi laburo”, explica el actor e imitador Ariel Tarico.