Tecnologías de 2017

La cuarta revolución industrial está en marcha. Inteligencia artificial, Internet de las Cosas y realidad virtual, entre otros actores, serán sus protagonistas. Qué se verá este año.

por Alicia Giorgetti

La revolución 4.0 promete cambiar la forma en la que nos relacionamos y trabajamos. La primera revolución industrial sucedió entre 1760 y 1830, y la marcó el paso de la producción manual a la mecanizada. La segunda

ocurrió alrededor de 1850, cuando surgió la electricidad, que hizo posible la fabricación en serie. Cien años más tarde, la aparición de la electrónica y de las tecnologías informática y de las comunicaciones (TIC) marcó la tercera revolución industrial. Y la cuarta, se basa en la convergencia entre tecnologías digitales, físicas y biológicas que, se estima, permitirá la automatización total de los procesos de manufactura.

Su nombre deriva de un proyecto de alta tecnología, iniciado por el gobierno alemán en 2013, para independizar totalmente la producción de la mano de obra humana. `La cuarta revolución industrial no se define por un conjunto de tecnologías emergentes sino por la transición de nuevos sistemas construidos sobre la infraestructura de la revolución digital anterior. En su escala, alcance y complejidad, la transformación será distinta a cualquier cosa que el género humano haya experimentado antes. Y afectará al mercado del empleo, el futuro del trabajo y la desigualdad en el ingreso`, predice Klasu Schwab, autor del libro La cuarta revolución industrial, publicado en 2016, y director ejecutivo del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés).

Justamente, el último WEF celebrado en Davos alertó sobre la posibilidad de que esta revolución elimine cinco millones de puestos de trabajo en los 15 países más industrializados del mundo. Pero, más allá de estas consecuencias indeseadas, la tecnología es imparable. En todo caso, habrá que evaluar cómo reconvertir las capacidades de esos trabajadores para que puedan estar incluidos en la revolución 4.0.

Además de esta visión global sobre lo que viene, muchos proveedores de tecnología ofrecen su propia perpectiva que, en general, está algo teñida con los productos y servicios que comercializan. No obstante, merecen atención también.

`MADE IN ARGENTINA´

Según un estudio realizado por la consultora D´Alessio Irol para la filial local de Microsoft, el 88% de las pymes argentinas invirtió en tecnologíás informáticas en 2016, aunque el 67% afirmó que, antes de invertir, observa las experiencias de otras pymes que ya incorporaron innovaciones. Para Marina Hasson, gerente del segmento Pymes de Microsoft para Argentina y Uruguay, `las pequeñas y medianas empresas también están atravesadas por la transformación digital, y la posibilidad de perdurar, crecer y capturar nuevas oportunidades; depende de cuán rápido puedan cambiar su mentalidad y reinventar su modelo de negocio`.

En el país, hay varias iniciativas que apuntan a la innovación tecnológica y que ya pueden mostrar algún dispositivo. Por ejemplo, en el Centro INTI Madera y Muebles se desarrolló un sistema inteligente para monitorear ciertos parámetros de procesos industriales. El dispositivo permite vigilar la temperatura, la humedad relativa y el sentido de circulación del aire dentro de cámaras de secado de madera. Lo interesante es que hará posible la sustitución de importaciones y que podrá implementarse en otros procesos industriales, tales como el tratamiento térmico de embalajes de madera o el acondicionamiento del acero para variar sus propiedades físicas.

El sistema tiene dos sensores -uno para cada lado de la cámara de secado- que envían los datos de temperatura y humedad al controlador o concentrador (hardware). Éste se comunica con una computadora, donde un software permite visualizar los valores en tiempo real para saber si en la cámara de secado está encendida la calefacción, los humidificadores, para qué lado giran los ventiladores, si están abiertas las chimeneas de ventilación, entre otros aspectos. Es posible, además, almacenar y recuperar datos, y programar cada cuánto se deben medir las variables y en qué niveles se desean mantener. Una de las ventajas es que el controlador es autónomo y, por lo tanto, no requiere la conexión permanente con una PC.

Actualmente, para hacer estas tareas en los secaderos, se usan placas de celulosa o métodos más precarios. `Este sistema se diferencia por su velocidad de reacción inmediata y por su precisión, ya que los sensores funcionan entre -20 y 100 °C de temperatura, y entre cero y 100% de humedad, con un margen de error menor al 1 y al 3%, respectivamente. Los otros métodos brindan valores estimativos`, dice Emiliano Arduini, integrante del Laboratorio de Insumos Madereros del INTI Madera y Muebles, y responsable del desarrollo.

En épocas en las que la energía eléctrica sube su costo, el control del consumo es una tarea indispensable para limitar gastos, tres emprendedores argentinos diseñaron y fabrican un monitor de consumo eléctrico, muy sencillo de usar, que se enmarca en la llamaada Internet de las Cosas, o Internet of Things (IoT).

Se llama Wabee y consta de una pequeña caja que se conecta al tablero eléctrico. Luego, hay que bajar una aplicación móvil a una tablet o smartphone con Android o iOS, y desde ella se puede visualizar en tiempo real la información de consumo eléctrico y recibir alertas ante cortes o picos de tensión. Así, mediante la red Wi-Fi, es posible saber cuánta energía eléctrica se usa, cuánto consume cada equipo, cuándo se cortó el suministro y cuándo se recuperó, entre otros datos. Es decir, ayuda a conocer los hábitos de consumo para tender al consumno eficiente. `La cuestión de la eficiencia energética es un tema donde todos podemos hacer un aporte concreto`, dice Claudio Figuerola, uno de los diseñadores. El equipo se completa con Gabriel Cacosso y Marcelo Gore.

El producto incluye componentes desarrollados en el país, cuesta aproximadamente $ 2.800, y superó los ensayos eléctricos previos a la certificaciónIRAM.

MUNDO HIPERCONECTADO

La Internet de las Cosas, o IoT, no se trata más que de la tendencia a dotar de conectividad a toda clase de productos, desde ropa hasta equipos industriales que pueden alertar sobre alguna condición no esperada.

Para Guillermo Castelli, CEO de la empresa Quadminds, el 2017 será el año de la IoT, entendida como `nuevas formas de conectividad de los sensores, con redes como Lo-Ra (Low Range), dispositivos más inteligentes capaces de tomar mejores decisiones y una fuerte disminución de su consumo de energía. El boom del mundo conectado`.

El ejecutivo opina que el impacto de la IoT podrá observarse en diversas áreas. Por ejemplo, el sector de los electrodomésticos comenzará a incluir nuevos y más sofisticados sensores que, al integrarse con los smartphones, permitirán a los usuarios gestionarlos en cuanto al consumo energético, su funcionamiento y el anticipo de fallas.

Otro segmento que podrá nutrirse de la IoT es el de los edificios. `Habrá ascensores capaces de gestionar el flujo de paradas, sensores de movimiento que permitan coordinar el uso de aire acondicionado y luz, y reserva de salas y espacios comunes desde una aplicación móvil. El foco será el uso más eficiente de la energía y su consecuente disminución de costos y de la huella de carbono`, afirma Castelli.

Algo que ya está en el mercado desde hace un tiempo son los weareables, dispositivos que se pueden llevar puestos y que permiten interactuar u obtener información. Concretamente, se integran a la ropa -por ejemplo, remeras-, los anteojos, los relojes, las pulseras, las zapatillas y más. Sus aplicaciones son varias: obviamente en el deporte, la salud y el entretenimiento, pero también pueden usarse en ámbitos industriales.

Castelli explica que incluyen `desde relojes inteligentes, o smartwatches, que centralizan muchas funciones del celular, hasta bandas capaces de medir oxígeno en sangre, pulsaciones y niveles de glucosa en tiempo real. En el sector de la salud, hay pulseras que combaten la muerte súbita en bebés y´kinesiólogos digitales´ que detectan movimientos de la cabeza, el tronco y las extremidades de los pacientes`.

Según un informe de Intel, habrá más de 50 billones de cosas y dispositivos conectados hacia 2020 y más de 200 billones de sensores que generarán gran volumen de datos. `La innovación va más allá de almacenar datos. Ahora, se analizan, se comparten y se actúa sobre ellos en tiempo real, algo que transforma industrias y soluciona problemas, incluso antes de que sucedan`, dice Lorena Zicker, gerente general de Intel Alemania fue el primer país en incluir la revolución 4.o en su agenda de gobierno como `estrategia de alta tecnología`. La revolución 4.o se basa en sistemas que combinan infraestructura física con software, sensores y telecomunicaciones. La Internet de las Cosas (loT) jugará un rol primordial en la revolución 4.o. La revolución 4.o sumará US$ 14,2 billones a la economía mundial en los próximos 15 años. Es probable que cambie completamente el mundo del empleo y que afecte a industrias del todo el mundo.

Argentina. Y agrega que al aplicar una inteligencia similar a la humana, a las máquinas, se logra un cambio real, sea un tratamiento altamente personalizado para un paciente con cáncer o mejores rendimientos de las cosechas.

MUCHO MÁS

Hace años que en la industria se usan brazos robóticos para diversas tareas. Según un informe de PwC, una red de empresas presente en 157 países que ofrece servicios de consultoría, auditoría y outsourcing, en 2005 había menos de un millón de estos dispositivos basados en inteligencia artificial, y hoy hay 1,8 millones. Su previsión es que en tres años haya 2,6 millones de robots industriales.

La tecnología puede aumentar la productividad al bajar costos e incrementar la eficiencia. Pero, `la automatización puede representar una mayor amenaza para el empleo, aunque esta estimación varía y hay datos contradictorios sobre su posible impacto. Según estudios de la Universidad de Oxford, el 47% de los empleos actuales pueden verse altamente amenazados por el progreso tecnológico en el transcurso de las siguientes dos décadas. Sin embargo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) indica que sólo puede considerarse en riesgo el 9% de los puestos actuales de trabajo. Las tecnologías digitales también crean nuevos puestos, por lo cual el efecto no es totalmente negativo`, afirma el estudio de PwC.

También asegura que la tecnología que complementa a los profesionales tendrá un efecto menos negativo sobre el empleo. `En el sector Servicios, donde el factor humano es de vital importancia, hay menos margen para que los robots -al menos por ahora- reemplacen a los humanos`, dice. No obstante, advierte: `Los cambios tecnológicos son una fuerza disruptiva para los empleados y para las empresas. De este proceso, pueden beneficiarse los trabajadores que cuenten con habilidades que aún las máquinas no poseen, como la empatia y la creatividad; y las compañías que logren adaptar de la forma más rápida posible dichas innovaciones tecnológicas`, concluye.

Otra transformación habilitada por la tecnología la sufrirá la realidad, que ya no será única: en 2017 se mezclará cada vez más con otras dos realidades, la virtual y la aumentada. Si bien la realidad virtual está presente desde hace años, recién ahora está al alcance de la mayoría.

Para Roberto Soboll, director ejecutivo de Productos de Alcatel Latinoamérica, `las redes sociales y la realidad virtual pronto tendrán una gran sinergia. Los video chats cambiarán la forma de relacionarnos. Quizás el mayor problema sea acceder a ambas tecnologías: tenemos acceso a las redes sociales, pero no tanto a dispositivos que habiliten la realidad virtual. No obstante, hay proveedores empeñados en hacerlo posible`.

Es cierto que la realidad aumentada aún no es utilizada mayoritariamente, pero el éxito reciente del juego Pokemon Go demostró el poder que puede tener vincular ambos mundos -el digital y el físico- a través de tecnologías móviles.

Según Zicker, `la clave será la realidad combinada. La realidad virtual y la realidad aumentada combinan entornos y movimientos de la vida real con entornos, acciones y objetos virtuales. Hoy, la realidad virtual no es tan virtual, porque requiere múltiples consolas, sensores, cámaras y controladores. Nuestro proyecto Alloy es una solución todoen-uno de realidad virtual, que permite operar sin cables ni sensores, y usando las manos para interactuar`. Éstos son sólo unos pocos avances tecnológicos que se verán en 2017.