Vuelven los clásicos: este invierno, las heladerías porteñas apuestan por los sabores vintage

Con la compra de un kilo de helado artesanal, este sábado regalarán medio de sabores vintage, como la crema rusa.

Castañas, nueces, higos, pasas de uva embebidas en ron, whisky. Todos estos ingredientes tienen calorías de las buenas, de esas que calientan el alma en el invierno. Todos ellos forman parte de gustos de helado tradicionales que, sin embargo, fueron desapareciendo de las heladerías. Pero este invierno vuelven con todo. Y para que la gente los redescubra, por iniciativa de la Asociación Fabricantes Artesanales de Helados y Afines, este sábado quienes compren un kilo en los locales adheridos a la promoción recibirán medio más de regalo de estos “sabores vintage”.

Los sabores que regresan a la oferta son kinotos al whisky, crema rusa, málaga, marrón glacé, crema de higos y moka. El rescate de sus fórmulas forma parte de un plan para que el helado artesanal se consuma todo el año. Porque se trata de gustos que se caracterizan por ser cremosos y darle protagonismo a frutas secas. Y su composición los convierte en una muy buena opción para comer cuando hace frío.

“El Helado Artesanal tiene un consumo cada vez menos estacional y desde AFADHYA lo incentivamos año tras año con nuestras campañas. De esta manera, hemos generado resultados notables, como un aumento en el consumo a casi siete kilos al año per cápita. Esta vez decidimos traer nuevamente los sabores clásicos vintage que, además, se distinguen por ser los que aportan más energía durante los meses más fríos”, manifestó Gabriel Famá, presidente de AFADHYA.

“Estos sabores de antaño nos remiten a los elegidos por nuestros padres y abuelos y nos remontan a aquellos años en donde la crema rusa, málaga o marrón glacé, eran favoritos -rememoró Francisco Maccarrone, vicepresidente de la entidad que reúne a los heladeros artesanales-. Esta campaña nos llena de recuerdos y volver a preparar estos clásicos vintage en nuestras heladerías forma parte de nuestro ADN”.

Una investigación de mercado realizada por AFADHYA junto a la consultora D’Alessio IROL revela que el 83,25% de los argentinos consume helado artesanal en todas las estaciones del año. Y 7 de cada 10 personas lo hace en invierno. Además, el 70% de las personas consultadas afirma que el helado gratifica.

Las recetas de de los sabores del recuerdo
Kinotos al whisky. Es un clásico argentino y se hace con una crema de huevo, parecida a la vainilla. Lleva los kinotos confitados, que se maceran con whisky y después se pasan por un molino para que la crema adquiera el sabor. Luego, se le agregan kinotos enteros.

Málaga.  Es una especie de sambayón y tiene su origen en la Argentina. Se usan pasas de uva rubias sultaninas embebidas en ron hasta que se hinchan por el licor. Las pasas no se mezclan en forma homogénea con la crema, sino que al sacar el helado de la máquina se hace un “variegato” con las pasas de uva. El variegato es una técnica tradicional, que consiste en una mezcla tosca, para que el helado quede marmoleado. La receta varía un poco según cada maestro heladero.

Marrón glacé. Se elabora con crema de huevo y castañas en almíbar. La preparación es parecida a la de kinotos al whisky, solo que con un variegato de castañas. Se le puede adosar algún licor que pueda funcionar.

Crema rusa. La base se hace con crema de huevo y después se le agrega una cantidad de nueces para que adquiera el sabor de la fruta seca, si es posible en caliente. Después de mantecarlo, es decir batirlo mientras se congela, se le agregan nueces a modo de variegato. Estas se pasan por un molino para que quede todo integrado. Es un sabor conocido en todo el mundo.

Moka. Es un sabor muy difundido en Italia y llegó a la Argentina con los inmigrantes. Para prepararlo se hace una infusión de café y después se elabora el helado con crema y azúcar. Lo más importante al momento de la preparación es que salga una buena infusión que le aporte su sabor característico al helado.

Crema de higos. Se distingue por estar elaborado con una crema blanca tipo chantilly. Luego se le agrega un variegato de higos en almíbar.

Publicado por Clarín el 10/08/19.

La inversión sigue mostrando caídas en todos los rubros salvo obra pública

Con un nivel de inversión sobre PBI en 13% y por debajo del promedio de los últimos diez años, casi todos los componentes muestran caídas, salvo los vinculados a la obra pública. Así lo marcan los datos del Monitor que lleva adelante la Agencia de Inversiones y Comercio Internacional.

Con datos al primer trimestre de 2019, la inversión en transporte cayó 56%, en equipo durable un 37% y en maquinaria un 31,5%.

Los flujos de inversión extranjera directa también cayeron un 10%. Totalizaron US$ 2.660 millones. Por las menores rentas, la reinversión de utilidades cayó un 27%. La IED representa el 2,3% del PBI.

`El crédito no crece. El crecimiento es, literalmente, cero. La inversión está en 13% del PBI contra un promedio del 20% en la última década y del 25% del PBI que es el promedio de los países emergentes`, explicó el economista Luis Secco esta semana en la presentación de las expectativas de los empresarios de IDEA. Allí, en una encuesta a cargo de DAlessio IROL, el 46% de los ejecutivos señalaron que prevén aumentar sus inversiones.

En ese marco también contestaron que prevén un 13% de inversión sobre su porcentaje de facturación anual para este año. Los desembolsos irán al desarrollo de obras civiles, tecnología, software y capacitación, principalmente.

Entre enero y mayo de este año la construcción cayó 9% pero el gasto de capital del Estado -el gasto en obra pública- creció 21,5%. Las compras de maquinaria y equipo, en cambio, cayeron 27% en los primeros cinco meses. En mayo mostraron una desaceleración con una caída del 15%. Lo mismo pasó con las importaciones de bienes de capital que en los primeros cinco meses bajaron 32% y en mayo 27%. En cambio, las importaciones de equipos para transporte no muestran mejoras. Cayeron 68% en cinco meses y 69% en mayo.

Publicado por Perfil el 03/08/09.

¿Por qué el resultado de Córdoba será clave en la elección del domingo?

Fernández busca sumar 1,5% al resultado de Scioli en el balotaje y llegar a 610 mil votos. Macri espera repetir la cosecha de octubre de 2017 y alcanzar el millón de sufragios.

A diferencia de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (Paso) de agosto de 2015, se espera un escenario de alta polarización en los comicios del próximo domingo. Es una atmósfera de balotaje la que instalaron las dos fuerzas mayoritarias, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, para condensar la intención de voto y alcanzar el mayor porcentaje posible.

Con el peronismo cordobés con `boleta corta` (sin candidato a presidente), todo indica que el grueso de los votos, como en la mayor parte del país, se dividirá entre Mauricio Macri y Cristina Fernández. La candidatura oficial, oxigenada con la presencia de Miguel Ángel Pichetto como vice, y la principal fórmula opositora, con la estratégica luición del exjefe de Gabinete Alberto Fernández.

Pocos lo recuerdan, pero en aquellas Paso de 2015 el triunfo en Córdoba se lo llevó la alianza que encabezaban Sergio Massa (hoy en el Frente de Todos) y el extinto exgobernador José Manuel de la Sota.

Compitiendo en la interna de Unidos por una Nueva Argentina (UNA) sumaron 744 mil votos, 65 mil más que todos los tres precandidatos de Cambiemos juntos (Macri, Ernesto Sanz y Elisa Carrió) y 463 mil más que el kirchnerismo.

Pero, ante este nuevo escenario polarizado, habría que tomar como referencia el resultado en Córdoba del balotaje de 2015. Por eso las expectativas de Juntos por el Cambio son altas.

Es obvio que ni propios ni rivales creen que Macri pueda reeditar la elección del 22 de noviembre de 2015, cuando aplastó a Scioli con el 71,5 por ciento. Sin embargo, todo indica que tiene chances de conseguir una ventaja que lo ayude a compensar el déficit que, dicen las encuestas, tiene en otros distritos.

En concreto, en aquel balotaje, la fórmula Macri-Michetti consiguió en Córdoba 1.545.217 votos, un volumen comparable con el de otras 11 provincias argentinas sumadas. Fue el distrito electoral en el que el voto a Cambiemos más creció entre las Paso y las generales (70%) y en el que consiguió la mayor ventaja: 43 puntos.

En aquellos comicios definitivos, Macri aventajó a la fórmula del Frente para la Victoria por más de 930 mil votos. La diferencia lograda era equiparable, por ejemplo, a la suma de las adhesiones que obtuvo Macri en otras dos provincias en las que también hizo grandes elecciones, como Mendoza (625 mil) y Entre Ríos (453 mil).

A tal punto es importante Córdoba para Macri que aquí obtuvo en 2015 incluso más votos que los que logró en la ciudad de Buenos Aires, distrito que gobernó durante ocho años y del que se fue con una altísima imagen positiva: el exjefe de Gobierno porteño contabilizó allí 1.258.151 votos (64,8%), 287 mil menos que en Córdoba.

Analizando en perspectiva aquellos números en Córdoba desde la visión del kirchnerismo, el balotaje fue una tragedia: Scioli obtuvo 616 mil votos, sólo el 28,4 por ciento. Comparando desempeños, en Córdoba sumó apenas un puñado más de votos que en Chaco (403 mil) o en Salta (400 mil), provincias con padrones con un tercio de electores que en esta provincia.

`Nuestro mejor escenario sería conseguir 30 o 32 puntos y que Macri no logre mucho más que 40 o 42. Creemos que eso es posible`, confió uno de los referentes locales del Psol, el partido del que proviene Eduardo Fernández, primer candidato a diputado por el frente opositor.

Para lograr el objetivo, con el actual padrón, Alberto Fernández debería sumar 611 mil votos en Córdoba, si la participación es baja (alrededor del 70%), y 699 mil, si la participación es alta (más cerca del 80%).

La última prueba en las urnas locales para el kirchnerismo fue en las legislativas de 2017, cuando Córdoba Ciudadana (el frente que apoyó Cristina) apenas logró 199 mil votos en el tramo para diputados. Cambiemos acarició el millón de sufragios (996 mil) y Unión por Córdoba, 626 mil. Imagen

La imagen de los candidatos también está en una grieta. Aunque en el Gran Córdoba la pobreza se elevó hasta el 36,5% y el desempleo, al 11,3%, la imagen positiva de Macri en los últimos dos años no bajó nunca del 41 por ciento.

Según datos del Monitor Social y Político que mensualmente Berensztein y D Alessio Irol elaboran para La Voz, la valoración positiva del Presidente entre los cordobeses creció 13 puntos en el bimestre pasado, de la mano de la estabilidad del tipo de cambio y de la moderación de la inflación. La imagen positiva se ubica ahora en el 54 por ciento.

En contraposición, la medición sitúa a Fernández con una valoración positiva del 26 por ciento (a julio) y una negativa del 69. Cristina mide peor: 19 por ciento de imagen positiva y 77 de negativa.

Publicado por La Voz el 05/08/19.

El 70% espera un aumento en sus ventas en el próximo año

Según la última medición de la encuesta de Expectativas de Ejecutivos, que realiza D’Alessio IROL para IDEA, se instaló cierto optimismo entre los empresarios: el 55% evaluó positivamente el semestre y el 78% considera que la situación económica mejorará de aquí a seis meses. Además, el 70% espera crecimiento en sus ventas en el próximo año.

Los factores que consideran como “positivos” son la estabilidad cambiaria, la merma de la inflación, el equilibrio fiscal y la menor incertidumbre económica. Sin embargo, aún persisten factores negativos como la inflación (que se mantiene alta), la pérdida de fuentes de trabajo y la falta de reactivación económica.

Algunos elementos que abonan este panorama son las expectativas para el próximo año, en su mayoría positivas. En cuanto a las exportaciones, el 43% considera que aumentarán y 46% que se mantendrán iguales. Un escenario similar se plantea en términos de inversión: el 47% espera un aumento en los próximos 12 meses. El mejor panorama es el de las ventas, ya que un 70% espera un incremento.

Por último, el factor empleo es el que espera menor crecimiento. El 39% espera tomar personal en el próximo año y 45% no evalúa modificaciones en este área.

Hacia el final de la encuesta, se les consultó a los empresarios qué movimiento tendrá hasta las elecciones el dólar, la tasa de interés y el riesgo país. El 57% considera que la moneda estadounidense tendrá pequeñas oscilaciones; 40% cree que las tasas continuarán bajando y el 41% evalúa que no habrá grandes cambios en el riesgo país, más allá de algunos movimientos.

La mayoría de los empresarios (67%) coincidió en que el elemento más necesario para aumentar la competitividad del país es una reforma impositiva.

EXPECTATIVAS

Eduardo D’Alessio habló en Eco Medios sobre las expectativas que tiene la gente sobre la economía y sostuvo que “este semestre fue mejor aun de lo que preveían y eso marca dos cosas. Por un lado que la mejora va a seguir hasta fin de año, que va a haber estabilidad cambiaria y que habrá un proceso de reactivación”.

Explicó que “el segundo semestre del año pasado hizo caer significativamente las expectativas” y que ahora “es importante que haya una percepción de que está bajando la inflación”.

Sin embargo, especificó que “más allá del optimismo, con la tasa impositiva, se percibe que no puede haber crecimiento ni desarrollo. Este es un país muy poco competitivo”.

Publicado por El Día el 05/08/19

Eduardo D’Alessio: “Los empresarios no esperan turbulencias”

Encuesta de expectativas entre los empresarios que desarrolló IDEA, ¿como interpretarías el optimismo que renació entre los empresarios? 

-Esta encuesta no tiene nada que ver con la política, no hacemos preguntas políticas en IDEA por decisión filosófica, tiene 24 años, ha tenido ascensos y descensos en todos los gobiernos… Con esa tranquilidad de que no estamos en la veda, les digo que el año pasado para los empresarios fue un año frustrante, indudablemente tenían una esperanza puesta en una reactivación de la economía que nunca llegó. Y esto fue lo que vimos en octubre del año pasado en IDEA. Eran algo más optimistas para este semestre, y la realidad convalidó aproximadamente que este semestre fue un poco mejor de lo previsto. En los últimos meses ha habido algún repunte en las ventas de algunos sectores y que los empresarios creen que no va a haber movimientos fuertes de la divisa, del riesgo país, y la tasa de interés de acá a fin de año.

-Es alentador, ¿tocamos un piso ya?

-Exactamente. En cuanto a las variables macro, le preguntamos hasta octubre, para justamente no tener que predecir que me digan ‘depende de quien gane’… En cuanto a las variables macro, indudablemente no esperan turbulencias. Lo que sí sigue permaneciendo como un reclamo a este gobierno y al que venga son algunos factores: el número uno es la necesidad de una reforma tributaria: sin reforma tributaria solo podemos pensar en cosas de coyuntura. Con una carga impositiva que por lo menos 10/15 puntos a los países limítrofes, más allá de la agricultura, es muy difícil la exportación.

El empresario argentino, ¿ve la macro hoy igual que hace 15/20 años? 

-Es una tan excelente pregunta que no tengo la respuesta. Hay ciertas cosas que no cambian: los problemas sindicales, el problema del costo laboral, y el problema de la presión impositiva. Lo que se ha sumado es el problema inflacionario, que no lo teníamos hace 15 años, y su causal, visto desde el punto de vista de los empresarios, que es el incontenible déficit del sector público. Una de las cosas que se le critica al actual gobierno es no haber terminado con la inflación, con el déficit del sector público, no haber hecho la reforma laboral, no haber hecho la reforma impositiva.

¿Qué va a pasar si se cumple un déficit cero, y empieza haber un superávit? 

-Indudablemente cuando uno ve la proporción del gasto público que es gasto social, que no se puede bajar, cuando uno ve la carga impositiva, que no se puede aumentar.. Cuanto más sigamos aumentando, menos vamos a recaudar. Porque el premio a la evasión es tan alto que cada vez tienta a más gente. Uno dice ‘que crezca la economía’, pero tenemos que crecer a tasas chinas para poder equilibrar esto… Creo que es un delicado equilibrio entre gasto, consumo, ahorro, inversión… Hay que tomar todas las variables de la economía e ir creciendo lentamente. Pero esto no se puede solucionar en el corto plazo ni en el mediano.

-A menudo se dice que la estabilidad cambiaria es el factor esencial para medir el humor social general, ¿qué ocurre en el humor del empresario? 

-Es muy difícil generalizar. En el monitor que hacemos con Sergio Berensztein, que es de humor social, hace tres meses que viene subiendo la imagen de gestión que coincide exactamente con el estancamiento del dólar. Hay una correlación uno a uno. En el caso del empresario, el aumento de las ventas es la madre de todas las batallas: el humor depende de las ventas. Porque algunos le vienen bien el dólar barato, porque son exportadores  netos, y a otro le viene mal porque son más importadores. Pero a todos les viene bien aumentar las ventas, y esto es lo que se ha notado un poco en el último semestre, y esperan que suceda en el semestre próximo. También esto impactaría sobre la toma de la mano de obra. Esto no es la primera vez que lo decimos: tenemos un problema de desocupación estructural. Sobran jornarelos y faltan ingenieros. El 80% de las empresas tienen algún cargo sin cubrir o cubierto con personal que no es idóneo para ese cargo. Por otra parte, sabemos que hay porcentaje de gente que está absolutamente excluida del mercado laboral. Además, la tecnología va apuntando a eso. Hoy para despachar más hay que saber computación. Cada vez se ponen menos ladrillos y se ponen más materiales sintéticos, que requieren especialización de la mano de obra. El cambio de tecnología está llevando que en la medida que no hay capacitación, esta desocupación tiende más bien anquilosarse.

-¿Llegaste a medir en alguno de tus estudios acerca de la disposición de los empresarios para sentarse a una mesa para discutir estos temas? 

-Esto lo hemos visto en varias oportunidades midiendo en el coloquio de IDEA, la predisposición está. Me parece que todavía hay un largo organizativo para que esto se ponga en marcha. Si uno ve las mesas de diálogo, algunos dicen que por el petróleo, la minería, etcétera, está funcionando bien…

 

Entrevista radial en “Es Por Acá”, Radio Milenium el 4 de agosto de 2019

Los empresarios creen que habrá poca volatilidad hasta octubre, pero le piden al Gobierno que controle la inflación

De acuerdo con los resultados de la encuesta realizada por la consultora D’Alessio para el Instituto de Desarrollo Empresarial Argentino (IDEA), el dólar, las tasas y el riesgo país tendrán leves oscilaciones hasta las presidenciales. También hicieron recomendaciones sobre qué debe hacer hasta los comicios

La estabilidad cambiaria, la desaceleración de la inflación, los números fiscales que tienden a lograr equilibrio primario a fin de año, la leve reactivación del mercado y la menor incertidumbre política permiten a los empresarios hacer una evaluación del primer semestre algo mejor de lo esperado y proyectar un segundo semestre con una recuperación. Sin embargo, las expectativas son moderadas.

Sobre cómo pueden jugar las elecciones en las variables económicas, el establishment coincide en que el dólar, las tasas y el riesgo país tendrán pequeñas oscilaciones, por lo que las expectativas de la mayoría apuntan a la estabilidad. De todas formas, remarcaron que en el tiempo que queda hasta octubre, el Gobierno debe controlar la inflación, concentrarse en la estabilidad económica e informar con claridad qué medidas tomaría en un próximo mandato, según surge de la encuesta realizada por la consultora D’Alessio Irol para IDEA, el Instituto para el Desarrollo Empresarial, que fue presentada esta mañana por Eduardo D’Alessio y el economista Luis Secco.

“¿Cómo cree que será el comportamiento de las siguientes variables hasta las elecciones de octubre?”, fue una de las preguntas de la encuesta. Sobre el dólar, el 57% de los consultados aseguró que tendrá pequeñas oscilaciones, mientras que un 26% dijo que se mantendrá igual. A su vez, un 7% considera que tendrá grandes oscilaciones y otro 7%, que aumentará. Sólo 3% de los empresarios sostuvo que seguirá bajando. Por lo pronto, viene subiendo levemente (hoy $45,40), aunque se mantiene 4% por debajo de fines de abril.

Con respecto a las tasas de interés, mientras que 40% de los consultados considera que “seguirán bajando”, 22% cree que seguirán igual y 38% señaló que tendrá leves oscilaciones. En cuanto al riesgo país, 41% aseguró que tendrá pequeñas variaciones y para el 36% de los empresarios, bajará. El 18% de los entrevistados cree que el índice se sostendrá igual. Hoy se ubica en los 800 puntos básicos, también con una tendencia levemente alcista.

Cuando se les preguntó a los hombres de negocios qué debería hacer el Gobierno hasta las elecciones, un 23% respondió que tiene que “informar y comunicar con claridad las medidas a futuro”; un 19% señaló que debe “contener la inflación” y un 15%, “concentrarse en la estabilidad económica”. Otras respuestas fueron “realizar consensos con otros sectores políticos”, “mantener la estabilidad cambiaria”, “seguir gobernando sin pensar en las elecciones”, entre otras.

La marcha de la economía

Sobre la evolución de la economía, los ejecutivos consultados sostienen una percepción mayor de la situación del primer semestre y confían en una mejora para lo que queda del año. Para el 78%, habrá mejoras en el segundo semestre, aunque la mayoría tienen expectativas moderadas (62%). Entre los factores negativos del escenario actual, mencionan la inflación, la devaluación, la falta de reactivación y la pérdida de empleo.

En cuanto a las exportaciones, muy pocos empresarios creen que subirán fuertemente en los próximos doce meses. El 46% cree que no se modificarán y un 34% respondió que aumentarán pero moderadamente. Un panorama similar se observa cuando se les preguntó sobre inversiones para el próximo año y lo mismo con la proyección de ventas: casi el 60% de los ejecutivos prevé una suba moderada de esta variable, según la encuesta.

Esta cautela en las expectativas empresarias también se vislumbra cuando se les pregunta por el empleo. Un 45% de los encuestados señaló que en los próximos doce meses no modificará su dotación de personal, mientras que un 39% señaló que sí lo hará, pero 34% lo hará moderadamente.

Consultados acerca de cómo fue el aumento de sus precios con respecto a la inflación en el último año, sólo 20% respondió que fue mayor. Tanto los sectores industriales como los del rubro de servicios perdieron contra la inflación, pero este último lo hace en mucho mayor medida, de acuerdo con la encuesta de D’Alessio.

Sobre el dólar, el 57% de los consultados aseguró que tendrá pequeñas oscilaciones, mientras que un 26% dijo que se mantendrá igual. A su vez, un 7% considera que tendrá grandes oscilaciones y otro 7%, que aumentará. Sólo 3% de los empresarios sostuvo que seguirá bajando

A su vez, los resultados del estudio detectan una mejora en el plazo de cobranza con respecto al semestre anterior. Respecto de la encuesta de octubre, creció el porcentaje de empresas que respondió que no se alargó el plazo de cobranza, mientras que para los próximos meses, el 75% prevé que se mantendrá igual, por lo que “la perspectiva tendería a no agudizarse”, según el documento.

Para el establishment, los temas importantes para el próximo año son la reforma impositiva, la obtención de crédito y los salarios, mientras que los principales factores para aumentar la competitividad del país son, para los ejecutivos, las reformas tributaria y laboral y bajar la inflación.

Acuerdo UE-Mercosur

El acuerdo de libre comercio firmado recientemente entre el Mercosur y la Unión Europea también fue un eje de consulta dentro de la encuesta. Y claramente se avizora una preocupación mucho mayor en la industria (especialmente en las pequeñas y medianas) que en el sector de servicios y agropecuario.

Mientras que el 90% de las firmas agropecuarias, grandes y chicas, creen que el acuerdo tendrá un efecto positivo, en las industrias pymes, ese porcentaje baja al 45%, y un 25% sostiene que será negativo. A su vez, un 11% de las industrias grandes cree que será negativo el acuerdo. En servicios, el 73% considera positivo el impacto y 24%, efecto neutro.

Empresarios de IDEA creen que el segundo semestre será mejor que el primero

Así surge de la Encuesta de Expectativa de Ejecutivos El 78% es optimista sobre la economía de los próximos meses y también mejoran perspectivas de empleo

Los empresarios que forman parte del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) estimaron que durante este segundo semestre sus compañías van a vender e invertir más, pero señalaron que eso no se traducirá en una mayor creación de empleo.

Así surgió de la Encuesta de Expectativa de Ejecutivos de IDEA presentada este jueves, que reflejó que durante el primer semestre del año, los resultados del relevamiento anterior (realizado en octubre de 2018) estuvieron “cercanos a las expectativas”.

El estudio, realizado por la consultora D Alessio Irol, se concretó durante julio último y abarcó a 212 ejecutivos de IDEA, de los cuales dos tercios pertenecen a compañías de servicios y el tercio restante, a la industria.

Para los ejecutivos, los “factores positivos” de la situación económica del país son la estabilidad cambiaria, la desaceleración de la inflación y el equilibrio fiscal.

Mientras que entre los negativos, advirtieron por la devaluación, la falta de reactivación económica y la pérdida de empleo.

De acuerdo con los resultados -al menos hasta las elecciones presidenciales de octubre- un 70% de las empresas esperan un aumento en sus ventas; el 46% confía en incrementar sus inversiones y un porcentaje similar considera que las exportaciones continuarán con el nivel actual.

Los niveles de inversión están por encima del promedio de los últimos ocho años, y continúan estables con respecto al semestre anterior.

Con relación al empleo, casi la mitad de las empresas admitió que no tendrá cambios en sus plantillas de trabajadores, aunque un 39% anticipó que “espera incrementar su dotación”.

En tanto, tanto para empresas grandes como para medianas y pequeñas, un 39% de los consultados aguarda mejoras en su rentabilidad y un porcentaje similar, cree que no verá modificaciones.

El nivel de operación de las compañías, por su parte, se mantiene muy similar al del año pasado: la capacidad instalada se encuentra entre el 50 y el 70% para el 32% de los consultados, y por encima del 85% para un porcentaje igual.

En cuanto al comportamiento de las principales variables de la economía, la mayoría de los empresarios estima que el dólar y el riesgo país tendrán “pequeñas oscilaciones” hasta las elecciones de octubre, mientras que las tasas de interés “continuarán bajando”.

Para los negocios empresarios, los ejecutivos consideraron imprescindible una reforma impositiva y el acceso a financiamiento.

En este punto, los cambios en materia tributaria son significativas tanto para la industria como para los servicios, pero para la primera es primordial la obtención de crédito, y para los segundos, los salarios y la “atracción de personal idóneo”.

Los empresarios estimaron, también, que los “temas urgentes” que debe resolver el país son básicamente la reforma impositiva, la Justicia y la educación básica.

Asimismo, atribuyeron los problemas de la economía nacional al déficit fiscal, la falta de acuerdo entre distintas fuerzas políticas y la confianza.

Por último, recomendaron al Gobierno informar “con claridad” las medidas que tome, contener la inflación y concentrarse en la estabilidad económica.

Publicada por iProfesional el 01/08/19

Tras tocar un piso, mejoran las expectativas de los empresarios

Según una encuesta hecha para IDEA entre ejecutivos, prevén un alza en las ventas y la inversión hasta octubre.

Entre noviembre de 2017 y abril de 2018, antes que llegara el cimbronazo de la devaluación, las expectativas de los empresarios alcanzaron los niveles más altos en una década. Sin embargo, tras la brutal depreciación del peso, todo comenzó a hundirse: los ejecutivos evaluaban mal su situación coyuntural y tampoco eran optimistas hacia adelante.

Pero la estabilidad cambiaria, la desaceleración de la inflación y la menor incertidumbre política provocaron, nuevamente, una recuperación de la esperanza a futuro. El 70% de los ejecutivos encuestados por D’Alessio/Irol para el Coloquio de IDEA manifiestan expectativas positivas para el período mayo-octubre de 2019 (la encuesta se cerró en abril). “Es una recuperación parecida al momento en que el presidente Mauricio Macri ganó las elecciones legislativas de 2017”, describe Luis Secco, economista que acompañó la presentación.

El 55% de los encuestados evalúa positivamente el semestre en curso y sube a un 78% su perspectiva para el próximo. Las firmas de servicios son las que reflejan mayor positividad, mientras que las industriales son las más desilusionadas.

“La evaluación del período (respecto de la medición anterior, presentada en octubre de 2018, en el coloquio de IDEA) fue mejor de lo esperada”, detalló Eduardo D’Alessio, a cargo de la encuesta. El 61% hizo una evaluación positiva de lo que vivió entre noviembre de 2018 y abril de 2019.

La muestra está hecha sobre 212 ejecutivos. “El equilibrio fiscal, las medidas que empiezan a hacer efecto y una leve reactivación del mercado” son vistas como factores positivos. La inflación, devaluación, los problemas para llegar a la reactivación y la pérdida de fuentes de empleo son los factores vistos como negativos.

Los tres grandes temas pendientes para mejorar la competitividad son la reforma impositiva (67% de las respuestas), la reforma laboral (53%) y la baja de la inflación (49%).

El 70% de los ejecutivos supone mayores ventas en esta foto de julio de 2019. En octubre, esa respuesta era solo del 43% de los encuestados. “Las ventas son un poderoso conductor del humor total”, agrega D’Alessio.

“Las exportaciones se mantienen bastante estables (dan un 2,4% de aumento en el primer semestre en dólares), el ajuste se está dando más a través de las importaciones”, detalla Secco.

En octubre, solo un 18% de los encuestados preveía mayor inversión. En julio, el 47% se ve con mayores desembolsos. “La inversión está en un piso histórico, es un 17% del PBI. En el primer cuatrimestre de 2018, era un 21% del PBI. El promedio mundial es del 25%”, analiza Secco.

En niveles de empleo, también se ven cambios de signo. En octubre, un 21% creía que iba a aumentar los puestos de trabajo. Ahora, son un 39%. “Se refieren al empleo en general, porque en las empresas hay un 80% de puestos sin cubrir”.

“Entre industria y comercio, se destruyeron 120.000 empleos sobre 170.000 total. Las empresas de servicio (consultoras, auditoras) son las que buscan retener talento e incorporar”, puntualiza Secco.

¿Cómo fue el aumento de sus precios respecto a la inflación en el último año?, les preguntaron. En octubre, el balance era de menos 20% negativo (pudieron recomponer menos que el costo de vida). En julio, da menos 31%. Más de la mitad trasladó aumentos menores que la inflación.

En octubre, cuando se haga el próximo Coloquio de IDEA, D’Alessio tendrá lista una nueva encuesta. Será muy cerca de las elecciones generales. Y pintará el estado de ánimo que habrá dejado el resultado de las primarias.En octubre, cuando se haga el próximo Coloquio de IDEA, D’Alessio tendrá lista una nueva encuesta. Será muy cerca de las elecciones generales. Y pintará el estado de ánimo que habrá dejado el resultado de las primarias.

El déficit fiscal (67% de las respuestas), la falta de acuerdo entre las fuerzas políticas y la confianza son los orígenes de los problemas de la situación argentina. También hay una recomendación al Gobierno: “informar y comunicar con claridad las medidas a futuro” es la salida de una de cada cuatro consultados. También está contener la inflación y concentrarse en la estabilidad económica.

Publicada por Clarin el 01/08/19

Los empresarios ven mejoras pero le piden al Gobierno que controle la economía hasta octubre

Estiman que el dólar oscilará hasta las elecciones. El 70% prevé un aumento en las ventas. Reforma impositiva, créditos y salarios, la agenda 2020.

Las expectativas económicas mejoraron para los empresarios nucleados en IDEA. El 55% cree que la situación está mejor en este momento y un 78% estima que seguirá mejorando el próximo semestre. Los estímulos al consumo como los Créditos Anses, Ahora 12 y planes sectoriales como el de los 0 Km, hacen que el 70% espera un aumento de sus ventas.

Muchos de los ejecutivos de la organización integran el grupo de whatsapp Nuestra Voz y apoyan abiertamente al Gobierno de Mauricio Macri. Los escasos márgenes de diferencia de las encuestas los ilusionan. Hasta octubre, sin embargo, le piden al Ejecutivo que mantenga la estabilidad de la economía y que comunique sus propuestas con claridad. “Una de las principales críticas es que explicaron mal las medidas”, señala el autor de la encuesta, Eduardo D’Alessio, titular de la consultora D’Alessio IROL.

El relevamiento se hizo de forma online entre 212 ejecutivos socios de IDEA durante julio. Dos tercios de quienes respondieron están vinculados al sector de servicios mientras que la porción restante corresponde a la industria. El 23% recomendó informar mejor. Otro 43% se enfocó en la macro: el 19% pidió contener la inflación; el 15% abogó por la estabilidad económica y un 8% por la cambiaria.  Los empresarios del chat que apoyan a Macri llaman a ir a votar a las PASO Sobre cómo llegarán las principales variables de la economía a octubre, el 64% de los empresarios cree que el dólar se moverá. Pero el 57% ve pequeñas oscilaciones. Para un 7% serán grandes y para otro 7%, aumentarán. 26% estima que seguirá igual. Un 36% prevé que el riesgo país siga en baja y un 40% que las tasas se achiquen. Alrededor del 40% imagina más volatilidad en ambos componentes. A la hora de definir la agenda para el próximo año, los empresarios pusieron el foco en la reforma impositiva, la falta de crédito y los salarios, temas que seguramente serán ejes en el Coloquio de IDEA que se realizará en Mar del Plata dos semanas antes de las elecciones de octubre, evento en el que se espera la presencia de los candidatos a la presidencia.  Variables. Sobre los cambios de expectativas, entre lo positivo, los empresarios citan la estabilidad cambiaria, la desaceleración de la inflación, el equilibrio fiscal, el efecto de las medidas, la reactivación del mercado y la menor incertidumbre política. Las elecciones primarias (PASO) llegarán en diez días pero este último punto es el que está asociado al escaso margen de diferencia entre Mauricio Macri y Alberto Fernández, en las encuestas, factor que también sostuvo la calma cambiaria. Del otro lado, los puntos negativos encuentran a la inflación, la devaluación, la falta de reactivación del empleo. “Parece contradictorio, porque de un lado y del otro está la reactivación o su falta, pero hay dispersión porque depende de los sectores”, explicó el director de Perspectivas Económicas, Luis Secco, durante la presentación. La mejora de las expectativas llega después de la “frustración del ‘18”, como la bautizó D’Alessio. Durante la mayor parte del año pasado, no sólo no se cumplieron las expectativas de los empresarios sino que el desempeño económico fue mucho peor al imaginado.  La baja de tasas en EE.UU. le da una mano a la economía argentina Ahora, además del 70% que prevé un aumento de ventas, hay un 43% que imagina una suba de sus exportaciones mientras que un 46% cree que no se modificarán. El 47% estima que habrá un aumento de la inversión en los próximos doce meses. Lejos de la lluvia de inversiones, este indicador está en 13% del PBI, según detalló Secco. “El promedio en los países emergentes es del 25% del PBI. Hoy el crecimiento del crédito es cero”, remarcó el economista. Las perspectivas de empleo, hasta ahora negativas, pasan a ser positivas. Un 39% espera incrementar su personal y 45% que seguirá sin cambios. Sólo un 16% prevé que caiga. También la rentabilidad cambia de signo y un 39% ve mejoras mientras que el mismo porcentaje se mantendrá en el nivel actual. En líneas generales, las empresas señalaron que no pudieron trasladar toda la inflación a precios el año pasado. El sector de servicios fue el que más tuvo que absorber el impacto de los precios. En algunos casos por no ser indispensables, y en otros, por ser regulados. El Coloquio del año pasado se centró en el “cambio cultural” y la causa de los cuadernos. Hoy el “buen funcionamiento de las instituciones y la Justicia” sigue estando entre los principales ejes para los empresarios, aunque debajo de la reforma impositiva, la laboral y la macroeconomía.

Publicado por Perfil el 01/08/19

Dólar “inquieto” y economía en marcha: qué esperan los empresarios para los próximos meses

Los ejecutivos ven con buenos ojos la estabilidad cambiaria y el freno de la inflación, pero critican la pérdida de puestos de trabajo.

En la previa al primer round electivo nacional del año, los empresarios dieron a conocer sus perspectivas para los próximos 12 meses: aguardan una situación económica favorable y, si bien no lo dicen, dejan entrever que esperan la continuidad de Mauricio Macri en la Casa Rosada.

Así se desprende de la Encuesta de expectativas de Ejecutivos de IDEA, realizada por D’Alessio Irol a 212 ejecutivos. Un hilo conductor los une: creen que los principales motores de la economía arrancarán pero, vale decir, parten de un piso demasiado bajo, ya que en el sondeo anterior –que abarcó el lapso de noviembre de 2018 a mayo de 2019- habían reflejado el pesimismo del sector empresarial.

Sobre el primer semestre, el 55% evaluó a la situación económica entre “mucho mejor” y “moderadamente mejor”. Para el resto del año, el 78% proyecta que el escenario será igual de positivo.

Al momento del desglose, los empresarios aplauden la estabilidad cambiaria, la desaceleración de la inflación, el equilibrio fiscal y consideran que “las medidas empiezan a hacer efecto”. Por el otro lado, señalan que la suba de precios aún existe, y critican la devaluación y que se perdieron trabajos.

La madre de todas las batallas para los empresarios son las ventas. Al respecto, el 70% proyecta que aumentarán mientras el 13% vaticina una disminución. “Hay un cambio sustantivo en el humor general. Es un vuelco desde junio de 2018, cuando el 39% hablaba de una caída”, acotó Eduardo D’Alessio, a cargo del reporte.

En comparación con octubre de 2018 (cuando se hizo la última medición) los ejecutivos apuntan que la inversión aumentará 47% dentro de los próximos 12 meses. El 16% cree que disminuirá y el 37% que no se modificará. El economista Luis Secco, que participó de la presentación del informe, destacó que “la inversión está en 13 puntos del PBI y que en 2018 era de 21”, por lo que había tocado un piso y ahí se explica ese porcentaje.

Dólar, tasas y riesgo país

Si bien todas las preguntas miran hacia los próximos 12 meses, una de ellas indagaba (con las elecciones de octubre como límite) por tres variables: dólar, tasas y riesgo país.

Para el 57% de los ejecutivos, el tipo de cambio tendrá “pequeñas oscilaciones” y para el 7% sufrirá “grandes movimientos”. El 26% consideró que “se mantendrá igual”.

Sobre las tasas de interés, el 40% proyectó que seguirán bajando, el 22% que se mantendrán igual y el 38% que habrá pequeñas oscilaciones. En esa misma línea está el riesgo país: el 36% apuesta a una baja y el 41% a leves oscilaciones.

La agenda

Si de marcar prioridades se trata, los empresarios no dudan: el 48% ve como necesaria una pronta reforma impositiva (y el 64% lo tilda de urgente). “Hoy en día, una de cada dos empresas dice que es vital una reforma de ese tipo”, subrayó D’Alessio. En ese sentido, los encuestados aseguraron que es un factor clave para mejorar la competitividad, como así también el 53% sostuvo que es crucial encarar una nueva ley laboral.

Por último, el 23% de los sondeados dijeron que, de acá hasta las elecciones de octubre, es necesario que el Gobierno “informe y comunique con claridad las medidas a futuro”; el 19% que se “contenga la inflación”; y el 15% que se logre definitivamente la estabilidad económica.

Publicado por TN el 01/08/19